28

350 29 1
                                    

HIROKO NAKAMURA (T/N):

-Come. -Pedí intentando sonar suave pero no lo logre, mi voz salió rasposa y levemente entrecortada. -No me apetece. -Repitió Kenma por quinta vez en el día.

Pasaron cinco días desde que Kuroo se fue y mi amigo esta más afectado de lo que pensé que estaría, el primer día en el cual Tetsuro no estuvo llego tarde a clases por haber quedarse dormido, sin aclarar que las ojeras debajo de sus ojos se ven fatales, los primeros dos días comió de la ausencia del gato estúpido Kenma comió con normalidad, pero los últimos tres días no ha querido probar bocado ninguno, cada que ve alimento hace un mohín como si fuese a vomitar.

-Joder, solo come un poco. -Espeté llevándome las manos a la cabeza, estábamos en la cafetería de la preparatoria, a pesar de que ya no fuese el horario del almuerzo nos encontrábamos ahí porque el profesor encargado de las ultimas dos horas de clase se ausento por problemas personales y no podíamos irnos antes.

He estado haciendo de niñera de Kenma estos días. -No me puedes reprochar, tu tampoco comes y yo no me quejo. -Aclaro Kozume mirándome mal. -Haces ejercicio, yo no. -Resople aún con mis manos en mi cabeza y los codos encima de la mesa. -¿Qué tiene que ver eso? -Pregunto como si no lo pillase. -Que necesitas fuerza y toda esa mierda. -Suspire cansada, retire mis manos de mi cabeza y frote mis ojos. -Ahora come. -Mande sintiéndome exhausta, Kenma comenzó a comer a regañadientes y le regale una sonrisa que por supuesto no me devolvió.

Respecto a mi y la ausencia de Kuroo, me sentía como siempre, los primeros tres días a penas comía por la falta de interés en aquello, no es como si mi vida cambiase mucho, en realidad los días eran iguales porque Tetsuro apenas y me dirigía la palabra anteriormente, solo me faltan esas miradas cómplices.

Lo vi dudar en el día en el que se fue, frente al autobús la duda sobre si marcharse o quedarse lo invadió y por poco abandona la universidad, lo vi yo misma pero al comentarlo con Kenma me dijo que era imaginación mía.

-Ahora come tu. -Espeto Kozume con los fideos en la boca, parecía un niño pequeño con cara de enojado, desconecte mi mirada de la mesa y la dirigí a él, lo fulmine con la mirada. -Dijiste que el temita de mi gran amigo no te había afectado tanto. -Carraspeo, me dio pinta que se estaba burlando de mi, las ganas de partirle la bandeja de comida en la cabeza aumento. -Y no lo hace, mi falta de apetito es por otro tema. -Dije mirándolo mal.

-Deja de mirarme así y comienza a tragar los fideos por esa boquita preciosa que tienes. -Pronuncio imitando a alguien, por supuesto que alguien como él no diría eso y no lo esta diciendo por ser él muy coqueto o lo que sea, lo hace para joderme porque escucho algo que no debería de haber escuchado el oro día.

Me levante de la mesa suspirando, planteando irme a casa, no había nadie más en la cafetería y no quería dejarlo solo, contuve la respiración al ver como mi compañero comía y me miraba con cara de perrito abandonado. -Lo siento, no fue mi intención. -Se disculpo él, alcanzandome la mano y guiandome para sentarme frente a él como anteriormente estaba, volví a colocar mis codos encima de la mesa y mis manos tapando mi rostro, exhale con fuerza.

-Entiendo que es dificil, lo es para ambos de nosotros. -Dijo sin mirarme, concentrado en su plato de fideos, de repente pude sentirlo más triste por lo que saque mis manos de mi rostro y las dirigí a su cara con suavidad, tome su rostro entre manos para que me mirase. -Ey. -Llame para que dejase de mirar sus fideos. -Deberías descansar -Suspire intentando sonreirle. -Yo estoy muy cansada también, debería tomarme un descanso. -Explique sosteniendo su cara, finalmente me miro a los ojos.

—Sí, tienes razon, deberíamos descansar de toda esta mierda. — Me respondio. — Somos apoyo mutuo, no podemos cansarnos tan de repente porque sino nos quedariamos sin el otro y no es justo.—  Dice, regalandome una mini sonrisa, asiento con la cabeza y ambos terminamos nuestros almuerzos como podemos. 

KUROO TETSURO:

Han pasado cinco días desde que llegue a la universidad y me esta yendo de maravilla, he conseguido amigos, tanto en clase como en la residencia estoy conociendo mucha gente, básicamente estoy muy bien.

Hablo con mis padres cada día, mi madre últimamente ha sido bastante intensa con el tema de llamadas pero se han relajo un poco esos últimos días.

Las clases no son muy pesadas por los que las sobrellevo bien, los profesores son todos unos viejos de unos aproximados 50 años en adelante pero se les da bien enseñar, la fiesta de bienvenida será mañana así que me siento nerviosos por eso.

He hablando con mis amigos, los extraño más de lo que pensé que lo haría, ellos dijeron que no era lo mismo sin su capitán en el equipo pero lo sobrellevan como pueden, al parecer aún están eligiendo quien será el capitán ahora que yo no estoy, nuevos integrantes han entrado al equipo por lo que se y ellos están muy bien.

Kenma... bueno es tema aparte, las llamadas que hice a su numero de contacto me las atendió Hiroko, las primeras dos veces que llame y oí su voz finalice la llamada de inmediato, no entendía muy bien que hacían ellos dos juntos todo el tiempo o porque razón tenia el celular de Kenma todo el tiempo.

Acabe hablando con ella la tercera o cuarta vez que llame al celular de mi amigo y atendió ella, le pedí una explicación del porque mi mejor amigo no me respondía, Hiroko dijo que Kenma se encontraba algo decaído y estaba pensando en dejar el equipo, total que sus ánimos eran una mierda y no quería saber nada de nadie.

Aún recuerdo la llamada en la cual le pedí estrictamente hablar con Kenma...

-Deja de atender tu y pásale el celular a Kenma. -Pedí sin siquiera saludar porque sabia que era Hiroko quien me estaba respondiendo las llamadas. -Eso intento pero cada que le acerco el celular me mira con mala cara, hay veces donde ni siquiera me mira. -Respondió Hiroko desde el otro lado de la llamada, su voz se notaba muy cansada, por un momento me dio pena ya que se que Kozume puede ser difícil de tratar a veces.

-Solo dile que soy yo quien esta llamando hace días. -Masculle. -Él ya lo sabe, no quiere hablar ni contigo ni conmigo así que déjalo así. -Espeto y logre escuchar un suspiro de su parte, unos ruidos como de que se estaba moviendo por la habitación o pasándole el celular a alguien. -Toma el celula- ¡KENMA! ¡EY! - unas quejas provenientes de Hiroko lejos del celular llamaron mi atención, parece ser que teléfono cayo al suelo o algo, escucho sus voces lejos. -No quiero hablar, Hiro, ya te lo he dicho. -La voz de Kenma sonó lejos.

-Que ya lo se pero es tu mejor amigo, esta preocupado por ti. -La voz rasposa de Hiro se hizo presente, unos ruidos volvieron a sonar, la voz suena cerca por lo que deduzco que han tomado el celular del suelo. -Hola... -Kenma hablo cerca, una sonrisa se instalo en mi cara. -Así que preocupando a tu chica. -Bromee irritándolo. -Voy a colgarte como sigas. -Espeto, vale, entiendo que no es el mejor momento para bromas. 

Así pase casi una hora hablando con Kenma por llamada, según él no quería hablar pero termino opinando acerca de mi universidad en base a lo que yo le había dicho, de vez en cuando escuchaba alguna que otra risa proveniente de Hiroko y me quedaba medio idiotizado, Kozume dijo que ella no estaba escuchando nuestra conversación sino que al contrario, estaba leyendo un libro y se estaba riendo ella sola.





𝐹𝐴𝐾𝐸 𝐿𝑂𝑉𝐸𝑅, 𝐼 𝐿𝑂𝑉𝐸 𝑌𝑂𝑈. ( Tetsurō Kuroo & Lectora).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora