farah.
había pasado una semana desde aquella experiencia algo extraña e incómoda con jimin.
aun no podía sacar de mi cabeza los pechos descubiertos de la chica y las manos de jimin sobre ellos, dios, qué asco.
hablaremos luego.
jimin dijo eso antes de irse, y yo me quedé como idiota esperando a que me llamara para hablar, pero su llamada nunca llegó.
no lo veía en la universidad para nada, ni con hoseok en recesos, ni entre clases, tampoco a la salida. nada de nada, parecía que había desaparecido.
no me había atrevido a ir a su casa, porque no tenía porqué hacerlo, el que quería hablar era el, no yo.
aunque bueno, si quería hablar un poco, pero no iba a aceptarlo.
— farah, pon atención.
asentí a yoongi, quien me picoteó el brazo derecho.
al término de la clase, ambos salimos hacia la cafetería, y lo primero que hice fue buscar a jimin con la mirada, pero no lo encontré.
bufé mientras me dejaba caer en una de las sillas del lugar, puse mi lonche sobre la mesa y sin ganas, lo abrí.
yoongi a mi lado, comía en silencio mientras escuchaba música en sus audífonos.
— ¿no crees que jimin se esté saltando clases, o si?
yoongi negó.
— no, jimin es responsable con la escuela.
— no lo he visto últimamente. — murmuré.
mi amigo se quedó callado por unos segundos, como si estuviera pensando en alguna mentira para decirme. pero vamos, yoongi no podía mentirme.
— tal vez le pasó algo, no lo sé, no he hablado con el.
— ¿y no te preocupas por si le pasó algo?
yoongi negó.
— siempre lo hace, está bien.
— ¿siempre hace qué? ¿se desaparece del radar por días siempre?
yoongi continuó comiendo, y supe que no iba a decirme nada, así que cuando vi a hoseok entrar a la cafetería, me puse de pie y jalé a yoongi conmigo.
este último me gruñó.
me acerqué a hoseok con una pequeña sonrisa, el nos saludó igual y terminó por acercarse a nosotros igual.
— hola, chicos. — sonrió — ¿qué cuentan?
— ¿sabes de jimin?
mi pregunta lo tomó por sorpresa, tanto que rascó su nuca un poco nervioso mientras sonreía.
— ah, jimin, creo que ya se fue.
— ¿estaba aquí? — dije al instante — ¿ha estado viniendo?
el asintió confundido. — jimin nunca falta.
asentí con torpeza.
— no lo he visto últimamente.
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soul tells 색상 ; park jimin.
Fanfictionesa noche, mi corazón se partió -si es que se podía aún más-. esa noche, lloré hasta que perdí todos los sentidos y mi cuerpo perdió toda la fuerza en él. esa noche, quise regresar el tiempo al primer día que lo conocí. esa noche, jimin se suicidó...