°•Más allá del amor•° [+18] RivaMika (Completa)

Capítulo 8

Hola, ¿qué tal? Disculpen por la demora, aquí les traigo un capítulo más de esta historia,  espero sea de su agrado.

💞💞💞

El pensar en todas las posibilidades no lo había dejado dormir. Escucho que una enfermera se acercaba y se acomodó en aquella cama de agua.

—Buen día, señor Ackerman. Vengo a revisarlo para la operación.

—Buen día.

La enfermera tuvo que cambiar el catéter, lo cual le dolía mucho a Levi ya que sus manos eran algo delgadas. Le tuvo que bajar la pierna del soporte, eso dolía tanto que Levi tuvo que morderse el dedo para no gritar. La sensación de sentir como el hueso se movía en el interior de la pierna rota era desgarradora.

—Vamos al quirófano.

Levi suspiró, estaba nervioso. Finalmente el doctor había llegado y todos entraron a la sala de operaciones.

Era frío, Levi solo tenía puesta la delgada bata. Entre 2 enfermeros lo pasaron hacia la camilla y luego le pidieron que se sentara y que tratara de alcanzar sus pies con sus manos, esto para colocarle la anestesia en la espina para que solo se durmiera la parte de la cintura para abajo.

Una vez la anestesia hizo efecto un enfermero tomó la pierna fracturada de Levi y la alzó, el no sentía nada. La lavó muy bien con yodo y luego le pidieron que se acostara en su costado izquierdo. El fémur sería el primer hueso a operar.

Al no haber dormido mucho en ese momento cerró los ojos y se quedó dormido. Unas horas más tarde despertó.

—¿Falta poco para que termine el doctor? 

—Ya casi acaba, no se preocupe.

Su hombro izquierdo dolía por estar en esa posición tan incómoda. Se volvió a acomodar y al despertar ya estaba en otra habitación, estaba conectado a varios cables los cuales transmitían los signos vitales a una pantalla.

—La operación salió bien. No se levante o puede marearse por la anestesia.

Levi solo asintió.

Una enfermera lo llevó de vuelta a su habitación. Ya era la hora de la visita y del almuerzo. Levi no tenía hambre, estaba cansado.

—Hange, rápido.

—Calmate Kuchel.

Se escuchaban las voces fuera de la habitación.

—Hijo ¿cómo estás?

—Mamá todo salió bien. 

—Qué alegría. Quiere decir que en poco tiempo estarás estarás casa.

—Bueno, falta el otro hueso. Solo operaron uno.

—Entiendo. No importa lo bueno es que estas a la mitad del proceso. Un día más, es un día menos.

[...]

Petra y Erwin se encontraban almorzando en un pequeño restaurante cerca de su trabajo.

—Erwin, tengo un asunto pendiente ¿puedo salir temprano del trabajo hoy?

—Está bien, pero a cambio quiero que aceptes una invitación a salir conmigo.

Petra tenía miedo de que Erwin la despidiera. Pero a la vez si quería salir con él, estaba cayendo en su trampa de seducción.

—Acepto.

Al final de su turno Petra se fue directo al hospital a ver a Levi. Entró y preguntó por él. La enfermera le indicó el piso y el número de habitación.