Reencarnado en una Kitsuné.

Prólogo.

(Donde estoy?.
No puedo ver nada.
No puedo sentir nada)

Era un vacío inexplicable, la oscuridad profunda era implacable rodeando todo a su alrededor sin la más mínima chispa de luz.

(Que fue lo que pasó? .   .   . A si, ya recuerdo, todo fue por eso)

++ Richard, 17 años, pelo negro, ojos cafés, 1,78 de altura.

Su padre, murió hace años.
Su madre, trabaja todo el día, apenas hablan.

Desde muy joven Richard tuvo que aprender a valerse por si mismo, su día a día era relativamente tranquilo.

Pero hoy no era el típico día a día.

Mientras regresaba a casa después de clases decidió caminar en vez de tomar el metro, mientras esperaba en un cruce se escuchó un fuerte estruendo.

- Cuidado!!!- se escuchó un grito.

Un camión se había volcado en un accidente y Richard y más gente estaban.

El sabía que podía esquivarlo a tiempo pero mientras se giraba para correr una señora con su niña tropezó.

(Buen momento maldita sea)

Richard se lanzó para empujar a la señora que apenas se reincorporaba sacándola del camino pero recibiendo el golpe de lleno del vehículo accidentado.

En sus últimos momentos noto como una multitud se agrupaba a su alrededor y del camión.

Pensó en decir unas últimas palabras en plan, "logré salvarla?" O "tranquila, no fue nada" para quedar como un héroe pero el golpe fue tan fuerte que lo único que salía de su boca eran sonidos incomprensibles y algo de sangre.

(Maldición, ni siquiera puedo decir una frase épica antes de morir)

Lentamente cerro sus ojos mientras un último pensamiento pasaba por su cabeza.

(Si saliera vivo de esta, me preguntó si seré popular con las chicas? A ellas les gustan los héroes, no?)++

(A cierto, eso paso)

Richard vio a la nada esperando saber que era exactamente lo que sucedía en ese momento exacto.

(Morí?, Estoy en coma?)

No sabía si el tiempo estaba corriendo o no pero espera una respuesta lo estaba poniendo impaciente.

No mucho después una luz empezó a inundar el vacío.

- veo que has despertado - dijo una voz qué sonaba majestuosa.

- q-quien eres?- pregunto temeroso y maravillado en porciones iguales.

- yo soy dios - respondió aquella voz.

- entonces estoy muerto?-

- así es, pero tú muerte fue por un sacrificio desinteresado por lo que todos tus pecados quedan perdonados -

(Todos mis pecados? Bueno supongo que he de tenerlos, pero entonces?.  .  .)

- que será de mi?-

- tienes dos opciones, puedes obtener el descanso eterno -

(Opción interesante y que tendré muy en cuenta)

- o puedes ser reencarnado en otro mundo -

- otro mundo? Cómo en los animes?-

- digamos que si -

En ese momento el lado Otaku de Richard se apoderó de él, la idea de viajar a otro mundo lo tenía tan emocionado.