Harry Potter Y La Venganza Del Mago

capitulo 2

Creditos por edición a :
kimiminimie
Gracias por ayudarme

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"Misteriosa muerte

Una squib fue envenenada por un medio desconocido, los aurores siguen trabajando en descubrir el método de asesinato y esperar que alguna pista los lleve al asesino.

Lo que mas preocupa a las personas es el hecho de que la residencia de esta persona está en frente de la residencia de la familia Durlsey quienes son los tíos del salvador del mundo, Harry Potter.

Rita Skeeter"

Y como Harry lo predijo, la muerte de Arabela estuvo en todos los periódicos, desde el quisquilloso hasta el profeta y esto le había causado unos pocos problemas, ya que debía permanecer casi todo el día en casa de sus tíos, ya que los aurores al enterarse de que

Arabela vivía en la misma calle que Harry Potter, el ministro como "persona que se preocupa por los demás" envió a 2 aurores a custodiar la calle hasta que las cosas se tranquilizaran.

Por otro lado no podía aguantarse la risa de ver a su tía caminar como si estuviese coja y se murió internamente de la risa al ver la mueca de desagrado que le lanzaba a Vernon cada que tenía la oportunidad, al parecer fue una tortura para la mujer.

Se preguntó internamente cuántas más cosas podría hacer para disgustarla, para destruir su matrimonio, por el momento seguiría suministrándole la droga a Vernon.

Dudley era otro caso, el chico no tenía a nadie para aliviar su tensión sexual, eso Harry podía notarlo con mucha facilidad, era un chico virgen.

Y por más que a Harry le desagradara la idea de meterse con su primo, sentía que obtendría una gran satisfacción al terminar con todo esto cuando llegase el momento, así que sin perder tiempo fue hasta la habitación de su primo cuando este se fue con su tía Petunia a sus entrenamientos y Vernon estaba en el trabajo.

La habitación era demasiado desorganizada, todo estaba tirado por todos lados, pero Harry no se concentró en eso, empezó a organizar algo para hacerse espacio y poder al menos tener paciencia.

Se desvistió y dejó su ropa doblada en un rincón, se puso una camisa grande de su primo y esperó a que llegase.

Pero luego de tanto esperar decidió leer un libro sobre pociones, después de todo debía mejorar en esa materia.

Alrededor de las 6 de la tarde escuchó el auto de su tía estacionarse, el primero en bajar fue Dudley, pero Petunia por alguna razón volvió a irse en el carro. Mejor así, no tendrían nadie que los interrumpiera.

Se sentó en la cama con sus piernas cruzadas y esperó a Dudley entrara a la habitación.

—Qué demonios haces a...?— Preguntó el recién llegado quedándose mudo la ver a Harry en su cama, con su camisa y en aquella posición.

Dudley jamás se preguntó por su sexualidad, pensó que jamás tendría dudas sobre ello, pero ahora mismo estaba teniendo dudas sobre lo que creía que era, pensó que era heterosexual, pero vaya que se había equivocado. —¿Por qué...tú así, aquí?—