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Team bros (Nightmare y Dream)

La noche caía, y la pelea era intensa.

Los Bad Guys hacían lo que podían al igual que su contraparte.

Dream esquivaba, usaba huesos y de vez en cuando parecía que iba a disparar una flecha. BlueBerry usaba sus poderes para atacar, cubriendo la espalda de sus compañeros. Ink usaba su pincel y pintura para atacar.

Los tres peleando por el bien común.

Los tres... Debían seguir juntos, ¿No?

Nightmare también daba todo de sí mismo. Burlándose de los contrarios cuando fallaban al igual que sus fieles siervos/compañeros. Cubría a Killer tanto como podía y viceversa.

Otra hora más iba pasando.

Dream estaba cansado. No quería seguir con la pelea. Quería llorar, correr, encerrarse. Quería olvidar todo.

Su mente estaba hecha pedazos.

Tenía que deshacerse del único ser en todos los multiversos al que quería con toda su alma, por quién antes juraba dar su vida, su mejor amigo, compañero... Su hermano.

Colocó otra flecha más, apuntando a la cabeza de Nightmare.

Una lágrima bajó hasta caer al suelo. Trataba de concentrarse, pero todos sus recuerdos lo estaban ahogando. Sentía un nudo en la garganta. Las lágrimas aumentaban convirtiendo lo que al principio era remordimiento en la más pura culpa. No quería vivir con la perdida que él mismo debía provocar.

No podía...

La vista se le hacía cada vez más borrosa por el llanto, sus sollozos silenciosos lo desequilibraban.

Poco a poco fue bajando el arco, hasta que apuntaba al suelo, la cuerda estaba floja de nuevo.

¿Por qué? Se preguntaba.

¿Por qué él? ¿Por qué Nightmare?

¿Por qué su único hermano?

¿¡Por qué debía matarlo!?

Colapsó.

Su cuerpo y alma no podían con tanto.

Terminó inconsciente en el frío suelo del bosque en el que peleaban.

Parecía que nadie se había percatado de su caída.

¿Cierto?

Un tentáculo silencioso llegó hasta él. Ocultando su cuerpo detrás de unos arbustos.

La pelea se extendió unos minutos más, y finalmente terminó, gracias a qué BlueBerry había sido lastimado, e Ink estaba agotado. Ambos se fueron, sabían como en ocasiones anteriores, que Dream se iba por su parte.

Los Bad Guys se dejaron caer al suelo, agotados, excepto uno: Nightmare.

Caminó jadeando hasta el arbusto dónde yacía su hermano, ajeno a todo lo que pasaba. Levantó uno de sus tentáculos, dispuesto a matarlo. Pero...

Ese día...

Ese día en el que se conocieron vino a su mente...

El día en el que supieron que eran hermanos, el día en el que ambos tenían su propia guarida hecha de palos que caían de otros árboles, el día en el que paseaban tranquilos. En ese día se la habían pasado hablando del futuro.

Nightmare recordaba a la perfección el "nunca te dejaré solo", todas las palabras de apoyo y cariño.

Cada cumpleaños en el que su hermano le preparaba alguna sorpresa para que se sintiera especial.

La vez que habían ayudado a un perrito y le habían apodado "Guardián" por haber defendido el árbol de unos niños traviesos.

La vez que estaban recostados en el pasto y ambos se dijeron "estoy para ti".

Sin darse cuenta estaba llorando.

Volvió a mirarlo.

No podía.

No quería.

Terminó volviendo a su forma pura. A la forma que necesitaba un abrazo, un te quiero.

Calló de rodillas, abrazándolo y llorando.

Se aferraba a él como si fuera lo más valioso en el mundo, y es que, eso era para él.

Poco a poco sintió como se removía entre sus brazos. Dream levantó la mirada con lentitud, se sentía cansado.

Lo vió. Luego de tantos años.

Tantas peleas...

Ambos pudieron abrazarse otra vez.

—¡Lo siento! ¡No quiero hacerlo! ¡No puedo!... No... No puedo— sollozaba Dream aferrándose a Nightmare.

—Yo tampoco— sollozó Nightmare.

—Ya no... No quiero ser un guardián— dijo Dream llorando, refugiándose en el calor de su hermano.

—No tienes que serlo— respondió Nightmare con la voz entre cortada.

Dream volvió a verlo a la cara, mientras que Nightmare limpiaba sus lágrimas, ambos se levantaron. Nightmare lo sostuvo. El resto del equipo lo miraban confundidos.

—Dream viene con nosotros— firmó.

Y antes de que alguno se opusiera, sacó un tentáculo amenazándolos.

—Y les sugiero que no se opongan, sigo siendo su líder— afirmó.

Dream solo se aferraba a él, no planeaba soltarlo nunca.

Y eso hizo.

Luego de esa noche.

Todo cambió para todos.

Dream había dejado todo atrás por él. Y no le importaba. Solo quería estar con su hermano.

Por fin, podían volver a disfrutar de tardes tranquilas, de noches durmiendo juntos.

Durante la mañana, Dream acompañaba a Nightmare a las reuniones que él tenía con su equipo. Nunca opinaba, pues no tenía interés o no sabía bien que responder.

Claro estaba que Nightmare no siempre dormía con Dream. Ellos lo hacían los fines de semana, ya que, el líder de los Bad Guys tenía un amor no tan secreto con Killer, uno de sus siervos/compañeros más leales.

Pero eso estaba bien para Dream.

Aunque eso involucrara que ayudará al enemigo más grande del multiverso.

Ya no lo quería dejar solo en ninguna batalla.

Extraños y tristes relatos (underverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora