El mago anillero

Capítulo XXXIV

Dante corrió todo el trayecto desde Hogwarts hasta Hogsmeade, si la carta era verdad algo o muy malo o muy extraño estaba a punto de pasar, al llegar a la plaza del pueblo, el chico miro en todas direcciones, no encontraba lo que estaba buscando.

- ¿Dónde estás? –dijo Dante entre respiraciones.

-Dante... ¿podrías... decirnos que pasa? –dijo Howard mientras él y las chicas recuperaban el aliento después de correr tanto –Ah... necesito salir a correr más.

-Ese olor –Dante recorrió el aire con la nariz, un ligero olor a barbacoa le llegaba –por allá –corrió detrás de una casa.

-Aquí vamos otra vez –dijo Ivy mientras ella y compañía giraban en la esquina que cruzo Dante, para simplemente golpearse con el chico el cual se había quedado quieto –¿Dante?

Los tres amigos miraron en la dirección en la que miraba el chico y vieron a un hombre de unos treinta años con rasgos asiáticos, con el cabello rubio encrespado, cubierto por una gruesa chaqueta de jean y piel animal, sentado al lado de una carpa para acampar, mientras cocinaba unas cuantas brochetas de carne sobre una hornilla portátil y mantenía una mirada de ansiosa en la carne cuya grasa chisporroteaba por el calor del fuego.

- ¿Señor... Beast? –pregunto Dante confundido.

El hombre volteo a ver al grupo, de pronto una enorme sonrisa se asomó por su cara, se levantó de su asiento de un salto abrió mucho los brazos y alegremente grito en japonés:

- ¡Dante! ¿Cuánto tiempo muchacho? –el hombre se acercó a Dante y le dio un gran abrazo, luego le indico al chico que se acercara al fuego –ven, ven, que ya casi está listo.

-Señor Beast ¿Qué hace aquí? –pregunto Dante en un japonés muy fluido mientras tomaba algo de distancia entre él y el hombre.

-Hay algunas cosas que tengo que hablar contigo...

-Eh... disculpen –dijo Scarlett llamando la atención del hombre, el cual volteo a verla confundida –¿Dante quién es este hombre?

- ¿Quiénes son? –pregunto Beast.

-Y ¿Podrías traducirnos lo que dice?

- ¿Qué dijo?

- "Suspiro" primero derivemos la barrera del idioma –Dante busco entre los bolsillos de su túnica, encontró un anillo con una torre tallada y se lo dio al señor Beast, el cual lo tomo y se lo coloco.

- ¿Me entiende ahora? –pregunto Beast.

-Sí, ahora si –dijo Ivy aun confundida –entonces ¿Quién es él, Dante?

-Bien, primero que nada, amigos él es Kosuke Nitoh, era un viejo amigo de mi maestro y también me ayudo en mi entrenamiento en su momento –dijo Dante –señor Beast, ellos son mis amigos Ivy, Scarlett y Howard, son buenas personas y saben mantener secretos

-Un placer –dijo Kosuke mientras saludaba con energía.

-Hola –dijo Scarlett –¿Por qué lo llamas señor Beast?

-Eso es porque yo soy Kamen Rider Beast.

-Espera ¿hay dos Kamen Riders? –pregunto Howard.

- ¿Dos? Somos muchos más que dos y cada año aparecen más –dijo Kosuke con orgullo –lo que me recuerda, Dante tengo que hablar contigo de un par de cosas.

- ¿De qué cosas? –pregunto Dante.

-Primero sentémonos, la comida ya está lista –Beast se apresuró a sentarse, cerca del fuego, luego miro al grupo –vengan siéntense yo invito.