Capítulo 125: Ti-an.

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Gildartz hincó la rodilla frente a Ill-Po luego de quedar muy lastimado por uno de sus ataques así que Cana se vio en la necesidad de lanzar proyectiles mágicos para obligar a la mujer a retroceder.

—¿Qué diablos haces papá? —se quejó la maga sentada sobre una roca —. ¿Necesitas ayuda?

—Esa hermosa jovencita es muy fuerte —Gildartz comenzó a reír.

—¿Jovencita? —Ill-Po se burló —. He vivido lo equivalente a cinco veces tu vida humano.

—¡¿Significa que eres una anciana?! —preguntó Gildartz decepcionado.

—¿Eres un completo imbécil verdad? ¡Te mataré rápido!

Ill-Po embistió a Gildartz molesta, su brazo derecho creció desproporcionadamente a su cuerpo con el fin de aplastar al mago. Gildartz abrió la boca muy grande por la sorpresa y cayó al suelo.

—¡Alto ahí! —Cana saltó de la roca —. ¡Lanzas de hielo!

La maga mostró una cartas en su mano, las arrojó y estas se convirtieron en tres enormes trozos de hielo que hicieron detener y esquivar a Ill-Po.

—¿También vas a interferir en mi camino? —preguntó la Xing long.

—No tengo de otra —respondió Cana sosteniendo más cartas —. Para eso estamos aquí.

—Ya deberían estar enterados de que yo soy la más poderosa después de nuestro honorable líder Tsao-Lan —Ill-Po hizo una reverencia —. Soy Ill-Po de la montaña. ¿Creen tener oportunidad contra mi?

—Yo soy Cana, Cana Alberona... Y es algo seguro que vas a caer el día de hoy.

—Ya veo... —Ill-Po sonrió —. ¡Entonces muere!

La Xing long apareció frente a Cana lista para asestar un golpe fulminante. Entonces Gildartz liberó una aura intimidante y rápidamente tomó a Ill-Po del enorme brazo y la arrastró por el suelo sin contenerse.

—¡Si te atreves a ponerle un dedo encima te mataré! —advirtió el mago con mirada amenazante.

—Humano de mierda —Ill-Po observó a Gildartz un instante con sus ojos completamente rojos y escalofriantes.

Gildartz saltó para atrás en cuanto vio magia ser emitida por la mujer. Un capullo mágico envolvió a Ill-Po y le dio la oportunidad al mago de colocarse frente a Cana. Una luz parpadeante los obligó a cubrir sus ojos por un momento y poco después la forma híbrida del segundo Xing long más poderoso hizo su aparición.

Las escamas de Ill-Po eran de un verde oscuro, contaba un total de ocho ojos, el par principal y seis dispersos por su rostro, completamente rojos y sin pupilas. Dos colmillos curvos salían de las esquinas de sus labios y cuatro patas insectoides extra, delgadas y de gran longitud se retorcían en su espalda.

Gildartz y Cana quedaron atónitos por la imagen de la mujer. De entre todos los Xing long, Ill-Po era la de apariencia más monstruosa en su forma híbrida, quedando prácticamente nada de humana en ella.

—Veamos que tan bien bailas humano.

—Será un gusto —respondió Gildartz confiadamente.

Gildartz tomó una enorme roca cerca suyo y la arrojó con todas sus fuerzas. Ill-Po se quedó quieta y en un parpadeo una de sus largas patas superiores la partió por la mitad sin esfuerzo.

—Algo tan simple no...

—¡Lo sé! —el mago levantó su brazo —. ¡Crash!

El hechizo de Gildartz alcanzó las dos mitades y en un instante se volvieron cientos de fragmentos volando contra la Xing long.

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