Bloody Mary:
1- Conocida como Bloody Mary en el mundo anglosajón, Hanako-san en Japón y Loira do Banheirola en Brasil, la historia relata que, supuestamente, el espíritu de una chica aparece cuando se pronuncia su nombre delante de un espejo un número determinado de veces (el número varía según cada versión).
Si no crees en fantasmas, este fenómeno también se puede explicar de manera científica. Mirarse en un espejo en una habitación con poca luz, durante un período prolongado, puede causar alucinaciones. Los rasgos faciales se distorsionan y desaparecen, mientras que pueden aparecer otros elementos alucinantes, como animales o caras extrañas. Hay un punto en que uno pierde la noción de su propia identidad, pues el sistema de reconocimiento facial del cerebro falla. También se dice que mirarse fijamente en un espejo durante un tiempo puede desencadenar autohipnosis.
El jinete sin cabeza:
2- Este personaje fictício se ha usado desde la Edad Media en la mitología germánica y celta, pero su popularidad creció con el relato de W.Irving en 1820, La leyenda de Sleepy Hollow.
Para los irlandeses, se le conoce como Dullahan. Es una criatura decapitada que va a caballo y lleva la cabeza bajo el brazo. A media noche, se le puede observar en los bosques y cuando dice un nombre, la persona nombrada muere en el acto.
En el folclore alemán, la historia del jinete sin cabeza es relatada por los hermanos Grimm, autores también conocidos por historias como la Cenicienta o la Bella durmiente, entre otras.
Por último, según los estadounidenses, el jinete sin cabeza fue decapitado durante la batalla de White Plains por una bala de cañón. Su cuerpo fue recogido por sus compañeros y enterrado en el cementerio de Sleepy Hollow (un poblado en Nueva York). Se dice que cada noche de Halloween, el jinete se levanta como fantasma en busca de su cabeza.
3- La niña de la curva: También conocida como "la autoestopista fantasma". Seguro que has oído hablar de esta historia de miedo: la leyenda cuenta que una joven aparece haciendo autoestop frente a los viajeros cerca de una curva peligrosa. Pide que la lleven y una vez está subida en el asiento trasero del vehículo, después de estar callada durante un rato, le dice al conductor: "cuidado, en esa curva morí yo" y desaparece.
Esta historia no tiene un origen definido, hay muchas versiones distintas y circula desde hace siglos en todo el mundo. Hay versiones de esta historia en Estados Unidos, Corea, Rusia, China, Francia, Italia y Suecia. Durante el paso del tiempo, se ha ido modificando el tipo de vehículo en el que se subía. En versiones más antiguas, no era un coche, sino un carruaje. Aun así, todas las versiones coinciden en alguien viajando que se encuentra con una autoestopista que desaparece sin más mientras que el vehículo está en marcha.
4- La llorona: Presente en el folclore latinoamericano y con orígenes prehispánicos, la historia de la llorona se desarrolla alrededor de una hermosa mujer llamada María, quien ahogó a sus hijos en un ríos por la ira de que su esposo la hubiera dejado. María se arrepintió al instante y se tiró al río para revertir sus pecados, pero en lugar de encontrar el perdón, fue maldecida a caminar por los ríos eternamente mientras lloraba y ahogaba a otros niños por despecho.
Hay paralelismos alrededor del mundo de este personaje: Medea en la mitología griega, Banshee en la mitología celta, Pontianak en la mitología malaya e indonesia, Onryo en Japón y otras sin nombre en Filipinas y en los pueblos yoruba de África.
5- El hombre de los sueños: En enero de 2006, un psiquiatra de Nueva York recibió en su consulta a una de sus pacientes como un día cualquiera. En aquella sesión, la joven le explicó que había soñado en repetidas ocasiones con un hombre al que ni si quiera conocía. Tenia una calva incipiente, las cejas muy gruesas y los labios extremadamente finos, en especial el superior. Mientras oía la descripción, el facultativo dibujó el retrato del sujeto. No le dio mayor importancia y lo dejó sobre la mesa.