A Good Life [Yoonseok]

Prólogo

Los últimos minutos se hacían eternos, quería llegar tan rápido a su casa como le fuera posible, pero no podía abandonar su turno en la biblioteca, necesitaba el dinero.

Siendo las siete y treinta de la noche, dejó el lugar, cerrando las enormes puertas de la entrada. Mala suerte tenía al estar bajo la fuerza de la lluvia que caía en las solitarias y frías calles de Seúl.

Caminó hasta su destino, tiritando del frío, deseando una deliciosa taza de chocolate humeante mientras se calentaba en sus cobijas.

No tenía una rutina interesante, en las mañanas desayunaba cereal y leche, caminaba hasta su lugar de trabajo, siendo un poco vago tener que estar a primera hora de la mañana, y rogándole al cielo un día tranquilo, dónde los estudiantes no dejarán los libros por ahí para después a regañadientes tener que ordenarlos o que derramaran café en las páginas de los libros polvorientos.

Durante su descanso, tomaba un refresco junto a una pieza de pollo y un poco de arroz. En su larga estadía, frente al escritorio, escuchaba a Post Malone, le gustaba su rap y su forma de interpretar a través de los versos un terrible desamor.

No era de muchas palabras, vestía de ropas oscuras que resaltaban su blanquesina piel y su cabello verde menta.

Su vida a los 19 años no era simple, escapando de casa a los 17 de las presiones de parte de su familia.

Ya era hora de cierre, bajando las escaleras pudo escuchar un sollozo, no pensó que fuera algo importante, ya había sucedido uno que otro borracho se escondía en un rincón oscuro de la biblioteca. Iba a seguir su camino, pero escuchó lo que era un llanto desgarrador, sus pies se detuvieron, sabía que si seguía adelante sin mirar atrás no pegaría el ojo en toda la noche.

Con un poco de miedo y curiosidad, se dejó guiar por el llanto, no se esperaba al dueño del llanto,un chico más o menos de su edad quién al sentir su presencia levantó su rostro, dejando ver al peli verde sus ojos hinchados llenos de lágrimas y sus mejillas rojas siendo bañadas por las ya derramadas, su cabello negro desordenado y sus labios sangrando

¿Qué podría estar pasando en la vida de aquel bonito chico que lloraba desesperadamente a altas horas de la noche frente a la biblioteca?