La guerra aún estaba marcha, y su deseo de volver a ver a su mejor amigo y rival no cabía en dudas.
Su espada resonó con la hoja de viento, lo impulso más halla de sus fuerzas, con una respiración acelerada y el sabor metálico de la sangre se dejó caer. Sintió el peligro venir y esquivo otra hoja de viento, miro con enojo al elfo que controlaba el cuerpo de su mejor amigo.
Sabía que dentro de poco el poder del demonio ya no le serviría, cinco minutos quizás, dentro de ese tiempo tenía que devolver a Yuno a su racionalidad. Pero era más complicado de lo que esperaba, tal vez porque ese elfo sabía controlar mejor el viento.
Aceleró con impulsó para dar un golpe que mandó a volar al elfo, viendo el estruendo parecía haberle hecho algún daño. Pero solo fue una vaga esperanza, corto un tornado de cuchillas con su espada, cayó al suelo sintiéndose agotado. El tiempo se le había acabado, golpeó el suelo con rabia las lagrimas se le habían acumulado en las pestañas negando en bajar.
— Patético, una derrota tan fácil —
Sintió como era agarrado del cuello, no le hizo ningún esfuerzo, tampoco opuso resistencia. Miro el rostro de Yuno, sus ojos eran azules por el cambio. Negó sin creerlo, no podía dejarlo así, tenía que haber una manera.
Intento tan solo darle un golpe, pero solo tocó su rostro, sintiendo la suavidad lo delineó con sus dedos al final dejo una mancha de sucio.
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¿Qué era lo que estaba pasando? No podía de dejar desear a aquel sucio humano, le era tan frustrante.
Podía ser algún deseo de la antigua alma, podía entenderlo. Pero le afectaba y eso no era normal.
Miro al humano "Asta" entre sus manos, sus ojos verdes se cerraban y abrían. Parecía adicto mirando esos ojos, deseando sus labios, miro los labios estaban llenos de sangre y partidos, ¿en donde era tentador?
Gruñó enojado, lanzó al humano "Asta" al suelo. Lanzó un encantamiento al aire, se dejó llevar por sus impulsos y quedo a la altura de Asta, sus dedos recorrieron el rostro sucio limpiando algo. Lo tomo del mentón y sello sus labios con los de Asta, al principio parecía asqueroso pero no dudó meter su lengua acariciando aquella boca, saboreando y probando a lo que era adicto.
Asta protesto en repuesta, necesitaba el bendito aire en sus pulmones, se alejo momentáneamente admirando como Asta parecía en busca de más. Sonrió cruel, y lo beso una vez más, saboreo su lengua, luchando con esta. Sus manos se movían entre la piel del contrario, era caliente y dura, estímulo los pezones y jugó con ellos, siguió decesdiendo y llego hasta su sexo. Duro y caliente, su boca pasó al cuello dejando mordiscos y chupones, era una locura pero no podía dejarlo.
Dejando una marca de besos llegó a los duros pezones, y los mordió, escucho las dulces protesta de Asta y eso lo encendió y ánimo a seguir, mientras su mano se movía una y otra vez en aquel duro pene, su boca jugaba con su cuerpo y mordía todo lo que podía necesitaba dejar su marca, aquel humano era suyo.
— ¿Qu-que? Mnh para —
Le escucho despertar, y quejarse de sus acciones, le miró desde su cuerpo y parecía tan erótico con aquellos ojos mojados, y sus labios entre abiertos y lanzando hermosos gemidos.
— ¡Ammh! —
No lo dejo seguir, metiendo tres de sus dedos en aquella boca caliente, los llevo mas lejos de sus garganta y tomo su lengua, veía la saliva fluir entre sus labios y él con todo gusto fue limpiando por donde llegó con suaves besos.
Cuando término con la boca sacos los dedos y los llevo a su agujero, estaba deseoso y expectante, metiendo uno sintió el cuerpo de Asta contraerse ante la incomodidad ocasionada.
Era de esperarse, pensó en ello. Llevó su boca al pene semi erecto, le dio una mirada y pensó en morderlo suavemente y pasar su lengua por la punta y bajar dejando marcas. El cuerpo de Asta se estremecía y erizaba, los quejidos fueron reemplazados por jadeos y gemidos.
Asta lo sabia, sabía que estaba sucediendo se sentía drogado; ahogado en el deseo que quemaba su cuerpo, nublando su mente y apagando su racionalidad. Debería de sentirse asqueado con sus acciones, pero no podía hacerlo. No por la manera en que aquel acto carnal le hacía sentir.
Se sentía... Libre... Cómo si hubiera dejado de tener responsabilidades. Era pecaminoso, pleno y simple, y suyo, lo disfrutaba. Podía sentir el calor creciendo, acumulándose en su abdomen con el movimiento que la boca de Yuno hacia en su pene. Cuando sintió en el clímax acercarse, se detuvo, y pudo apreciar el movimiento de los dedos en su interior con más detalle.
— Ya es hora... — había susurrado en su oído, con un leve mordisco.
Y sin cuidado ni gentileza penetró en él, ya había esperado demasiado. Quizás debía de ser suave, podía sentir como los músculos de Asta se contraían al rededor de su pene, en respuesta al dolor. Pero entre más esperara más doloroso sería.
Quiso decir alguna palabra de consuelo, pero desecho esa idea al instante comenzando a golpear aquella cadera.
Embistió en él sin reparó; sus gemidos eran una mezcla de dolor y placer siendo música para sus oídos a la vez que su espalda se arqueaba más hacia él. Asta era una terrible adicción.
Se rió contra su pecho, mordisqueando la piel de cuello, haciendo que Asta siseara de placer. Solo de pensar en todo lo hacía, lo volvía al borde de la locura.
Aquella alma que pensó débil, se levantaba con más fuerza, luchaba contra su dominio. Oh, pero que gratificante, saber que aquello que más valora estaba siendo probado por otro, sonrió y a la vista se cualquier persona aquella sonrisa era cruel y sádica. Pero sus ojos eran una mezcla de azules y dorados, ahora compartían el mismo cuerpo y los mismo pensamiento.
Yuno había vuelto, él vio todo. Pero al saber que lo podría disfrutar aún más ocasionó que no parará no podía, al final siguió embistiendo.
Porque Asta era su mayor tesoro, y su perdición. Lo llevaba al borde de una locura.
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La autora tiene algo que decir:
La guerra aún en curso: "todos sentían que se perdían de algo importante"
La autora: Hola ✧◝(⁰▿⁰)◜✧ cómo están, siempre quise subir algo relacionado con los elfos, me pareció ideal llevar acabó la idea cuando Yuno fue poseído.
Está claro que nunca me canso de esta pareja, es muy versátil. Dentro de poco subiré otra, con el mismo elfo, me parece caliente como Yuno puede sentir celos de si mismo.
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Al Borde De La Locura /BL/ (Yuno X Asta)
Fanfiction"Debía de ser imposible, una tentación y un pecado"