Protección de testigos.

Capitulo 11.

Capitulo dedicado a Jafeth_16 (Aquí esta tu capitulo xD)

2:30 p.m

2:45 p.m

2:50 p.m

¿Porque el tiempo siempre pasa tan rápido cuando uno quiere que se detenga, ah?

¿Nunca se lo han preguntado?

Pues yo si. Y desde que empezó mi turno no eh dejado de hacerlo.

-Aqui tiene- Le entregue el cafe a la chica castaña del otro lado del mostrador -Gracias por venir- Le entregue el cambio y sonrei.

-Gracias- Me devolvió la sonrisa y se alejo hacia la puerta de cristal. La abrio haciendo que sonara la irritante campanilla que anunciaba cuando alguien entraba o salia del local.

Odio esa campanilla, pero hoy es diferente. Hoy... quisiera quemarla para luego bailar alrededor de sus cenizas.

Y no exagero.

Después del espeluznante encuentro con Peter y de que fueramos a comer pizza, Chris...

Mejor lean esto.

FLASHBACK

Estabamos subiendo por el ascensor, que no se cuando mierda repararon, y todos hablaban animadamente. Menos yo, que todavia pensaba en el encuentro con Peter hace un par de horas.

¿Sabrá donde vivo?

¿Donde trabajo?

¿Habrá reconocido a Charlie?

Esas y mil preguntas más rondaban por mi cabeza, y todas sin ninguna respuesta.

El sonido del ascensor anunciando que llegamos a nuestro piso, me sacó de mis pensamientos. Salí después de Charlie.

Caminaba por el pasillo con mi mente siendo atormentada por la muchas preguntas que fabricaba mi subconsciente, cuando Chris habló.

-Bien- Dijo recargando todo su peso en la puerta de mi departamento obstruyendo mi camino... ojalá la puerta se abriera y se rompiera la nariz otra vez -¿Qué te parece esté viernes?- Dijo con una sonrisa arrogante estampada en su cara.

Frunci el ceño finjiendo demencia. Claro que recordaba su estupida condición.

-¿Qué?- Pregunté con falsa confusion en mi voz.

-Nosotros pagamos la pizza- Dijo con el ceño fruncido, señalando a Lucas y él.

Esto sera divertido.

-Cierto- Me acerque a él. Tragó saliba -Muchas gracias- Dije con voz provocativa y poniendo mis manos en su cuello.

Una sonrisa aparecion en mis labios, pero se borro cuando una igual se formó en los suyos.

-Si- Tomó mis manos y entrelazo nuestros dedos. La que trago saliba esta vez fui yo, lo que hizo que su mirada se separara de la mia para instalarse en mi cuello. Lo cual me puso más nerviosa.

Sin saber cuando pasó, me acorralo contra la puerta en la que él estaba arrecostado.

-Te busco en tu trabajo este viernes- Susurro en mi oído. Los bellos de mi nuca se erizaron al sentir su tibio aliendo chocar contra mi piel -¿Esta bien?- Volvió a susurrar, pero esta vez atrapo mi lobulo entre sus labios. Lo cual me hizo sentir algo que nunca había experimentado.

-S-si- ¡¿Porque coño tartamudeo?!

Sonrio en mi cuello, lo cual me causó un cosquilleo en esa zona.