My Pretty Criminal

•12•

_¿¡Por qué no deja de molestar!?_ Joaco gritó harto de que su celular no dejará de sonar con llamadas de Dylan, las había estado ignorando y pensó en apagar su móvil, pero no podía porque estaba hablando con Emilio.

_¿Y si lo bloqueas?_ Ji-ho le sugirió.

_Si hago eso no podré usarlo cuando necesite escaparme_ hizo un puchero.

_La otra solución es apagar tu celular, pero quién sabe de qué tanto hablas con ese policía que no quieres hacerlo.

_Es que sigue trabajando y no puedo ir con él.

_Espera, esta trabajando ¿y aún así te contesta?

_Sip~

_Que buen policía_ mencionó de forma sarcástica.

_El mejor de todos~_ otra llamada hizo sonar su celular e hizo una mueca de fastidio_ ¡¿Qué no se cansa!?_ iba a ignorar de nuevo la llamada, pero se fijó en la pantalla viendo que tenía un nuevo mensaje que lo hizo sonreír_ ¿Le puedes decir a Camilo Hyung que voy a salir contigo?

_Ya que_ se echó a lado de Joaquín_ ¿A qué hora?

_A las siete, hoy Mailo sale a esa hora.

_Esta bien, pero quiero algo a cambio.

_¿Qué?

_Lo que te he pedido por semanas, pero no haces.

_Ah, las mejoras a tu arma_ mencionó sin importancia_ No lo hacía porque no me pagabas, pero ahora lo haré.

_¿O sea que para que trabajes necesitas algo a cambio?

_Nadie trabaja gratis, hasta la misma definición de trabajo es esa, un conjunto de actividades realizadas con el objetivo de alcanzar una meta, solucionar un problema o producir bienes y servicios para atender las necesidades humanas.

_Me preguntó cuántas veces dices eso para aprenderlo de memoria.

_Eso es lo que pasa cuando estudias en casa y tu maestro es tu hermano mayor, te obliga a estudiar cada que quiere_ refunfuño.

_Al menos estudias, muchos de los que trabajan aquí es porque no tienen la oportunidad.

_Lo sé, pero eso ya no es mi culpa. Hyung les da la posibilidad de estudiar, igual a los niños que rescata se les da la oportunidad, la mayoría escoge trabajar para él.

_¿Ya fuiste a ver los nuevos niños?

_No, Camilo Hyung me dijo que no debía ir aún, no lo entiendo.

_Puede que sea por tus heridas, es bastante sobre protector contigo.

(...)

_¿Tiene algo que hacer esta tarde?

_No_ Emilio contestó sin despegar la vista de su móvil.

_¿No?, ¿Salir?, ¿Pasar la tarde con alguien?, ¿Una cita?_ Alejo preguntó interesado.

_No.

_¿De verdad?

_No tengo nada que hacer en la tarde, Alejo, ¿Por qué tanto interés?

_Sino tienes nada que hacer en la tarde tal vez puedas ir conmigo y el resto a comer pizza~

_No, gracias.

_Pero dijiste que estabas desocupado.

_Me gusta estar en mi departamento.

_Podemos llevar la pizza a tu departamento_ sugirió.

_No, pero gracias por considerarme_ mostró una mini sonrisa y Jung intentó ver la pantalla del celular de su jefe, alcanzando a ver una foto del mismo chico que Osorio estaba viendo la otra vez.

_¿Es tu novio?_ preguntó.

_No.

_¿Te gusta?

_No y deja de andar de chismoso, yo no ando revisando tu celular_ apagó su móvil.

_Lo siento, jefe.

_No importa, ya debo irme.

_¿Entonces no quiere ir?

_No, Alejo, pero gracias por invitarme.

Emilio se fue a cambiar de ropa y se dirigió a su automóvil, sabía que cuando llegara a su departamento Joaquín ya estaría ahí. Pasó a comprar algunas cosas al supermercado y siguió hasta su departamento, como había pensado, ahí estaba el criminal sentado en su sala.

_Hola, Mailo~_ lo saludó.

_Hola, Joaco_ dejó las bolsas sobre la mesa y busco algo en una de ellas_ traje tu leche.

_Yay~_ el mayor le entregó la pequeña caja de la bebida_ en lo que llegabas pensaba sacar a pasear a RapMon, pero la otra vez me dijiste que no podía llevarme a tu perro sin tu permiso.

_Si quieres podemos llevarlo a pasear después de comer.

_Voy a preparar la cena_ anunció el menor y se levantó del sillón.

_Espera_ Emilio lo detuvo_ no debes usar tus manos, te puedes lastimar.

_¿Y que se supone que vamos a comer?

_Yo prepararé la comida.

_Pero dijiste que no sabías cocinar._Puedo ayudar...

_No, bebé_ se negó, pero se dio cuenta de como llamó a Joaquín.

_¿Bebé?

_¡Ignora eso!

_Me gusta~_ siguió al moreno a la cocina.

_Pensé que odiabas que te pensaran eres un niño chiquito.

_No me molesta si tú me llamas así, Mailo~

_Ve a sentarte y espérame.

_Falta algo_ las mejillas del oficial se colorearon de rojo.

_Bebé..._ murmuró.

Joaquín sonrió orgulloso y le dió un beso en la mejilla para irse sentar al comedor.