SHADOW: OBSESIÓN [en proceso] ||En Edición||

1.°Erick°

"Las puertas del paraíso se parecen más a una cerca de madera"

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"Él más resiente caso deja al descubierto el hallazgo de otros cuerpos, dos jóvenes desaparecidos desde hace tres años fueron encontrados en la institución estos hechos dejan a la comunidad aterrorizada se recomienda precaución"

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Colegio estatal, Carolina del Sur 11/02/2016.

—Erick! -—llama la rubia entrada del salón al ver a Erick se detiene un momento y lo mira con el ceño fruncido—¿Vienes? Es tarde y debo regresar pronto a casa.

—Puedes adelantarte si quieres, aún tengo algo que terminar—dice Erick sonriéndole encantador, mientras vuelve a leer muy concentrado.

—¡Ok! Llámame en cuanto llegues a casa ¡Adiós!

En cuanto se fue la rubia; empezó a sentirse un ambiente pesado, el cual hizo que Erick se sintiese observado y desconcertado, tratando de que sus ojos se acostumbraran al oscuro rincón, frunció el ceño, algo se movió lo que lo hizo saltar un poco acelerando su corazón, de la oscuridad sale un hombre alto y delgado, sus labios abultados formaban una sonrisa maquiavélica, Erick miro su boca subiendo por su perfilada nariz con la intención de mirarlo a los ojos, pero la oscura gorra que los tapaba lo evitó.

Luego de unos segundos una voz dulce que inevitablemente conocía y lo hizo querer correr susurro.

—!!woah!! qué hermoso luces hoy Erick"

Asustado trato de levantarse, pero su cuerpo quedó inmóvil, susurrando formuló unas palabras cortas:

—Ya basta de observarme—suplico— estoy arto de sentirme acosado por ti—una lágrima se deslizó por su blanca piel como un copo de nieve y su boca tembló.

—Solo tú tienes la culpa por lucir de ese modo tan provocativo— su melodiosa voz hace eco y sale de la oscuridad lentamente.

Erick lo mira de abajo hacia arriba zapatillas negras fue lo primero que vio, sus piernas largas Lucían un pantalón negro, más cerca de la luz pudo, ver qué lleva una camisa blanca y una chaqueta larga negra que llegaba a sus rodillas, Erick se quedó estático cuando vio su rostro y cayó de espalda arrastrándose, sus ojos se abrieron como platos y sintió desfallecer.

Lentamente, se acerca a Erick sonriendo, al ver la desdicha de su presa atrapada, que trata de huir se llena de euforia y su voz se suavizá a un más sonando tan dulce:

—Yo solamente, quiero hacer arte con tu piel—lo toma de la barbilla haciendo que lo mire, sus ojos café lo cautivaron una vez más llenos de lágrimas, llenos de terror.