De nuevo, al llegar a clases me despedí de mi novio para que se fuera con sus amigos y espere que se fuera para comenzar a hablar con mi mejor amiga.
-¡Quiero morirme!- dije abriendo el casillero.
-¿Qué paso?- dijo en un tono infantil.
-Mi madre esta en mi casa, por tres días- dije frustrado.
-¡Wow! ¿qué me perdí?- dijo ella jugando con su cabello.
-Me llamo un día a las tres de las mañana estaba cansado y medio despierto por lo que no le preste nada de atención a lo que me dijo, y luego ¡Bam! llega con sus maletas ayer- dije haciendo una mini actuación de todo lo ocurrido.
-¡Dios! ¡quiero conocer a tu madre!- dijo feliz.
Iba a responderle cuando paso la cosa más molesta del mundo por nuestro lado con su nuevo novio de la semana.
-Hola perritas- dijo con su chillona voz.
-Hola putita- dijo Martina poniéndose a la defensiva.
Aunque odie a Fernarda tengo que admitir que estas dos chicas me hacen reír.
-¡Eres una maldita!- dijo alejándose.
-Que molesta ¿no?- dijo Martina una vez solos.
-Solo quiere ser parte de algo- dije riendo un poco mientras que sacaba el libro.
-Tienes razón. Como te decía, seria genial conocer a tu madre- dijo ella.
-Sí, pero...- dije haciendo una cara de perrito.
-¿Qué? no tengo dinero- dijo ella mostrando sus bolsillos de los pantalones.
-No es eso- dije sonriendo -mañana es mi aniversario de un mes con Chris y tengo que comprarle algo ¿me acompañas?-.
-¡Claro!- dijo ella.
Estábamos en el centro comercial, estaban los tres chiflados, Esteban, Nick y Martina.
Realmente fue casi imposible venir sin Chris, ya que es muy celoso y odia que salga sin él, pero le insistí que iba a salir solo con mis amigos a lo que igual no quería que viniera, pero logre escaparme de casa victoriosamente.
-¿Cuál es el plan?- dijo Nick.
-¿Qué plan? sólo tenemos que ir a comprar algo lindo para Chris- dije como si fuera lo más fácil del mundo.
-¿Una carta? ¿ropa? ¿joyería? ¿gorros? sabes que le encantan los gorros ¿zapatillas? pero recuerda que talla es- dijo Esteban volviendo esto más difícil.
-No lo sé- dije preocupado.
-No te preocupes, bebé. Tenemos a los homosexuales mejor vestidos de la cuidad aquí, nada saldrá mal- dijo Martina apuntando a Esteban y Nick.
-¿Quienes?- pregunto Nick mirando hacia atrás de él.
-Estoy perdido- dije frustrado.
-Ok. Menos charla, más acción- dijo Esteban entrando en la primera tienda.
Buscamos en toda la tienda, pero cada cosa que me mostraban no me convencía en lo absoluto, a todo le faltaba algo, nada tenia ese toque, nada era el estilo de Chris.
Pasamos a barias tiendas más pero cada cosa que veía me preguntaba cuanto le gustaría a él y nada, nada me gusto.
Es nuestro primer mes y me gustaría algo que pudiera llevar siempre con sigo mismo, algo que sea su estilo, algo que este en mi presupuesto, el primer mes es especial y debía tener algo digno de Chris.