⛈ Donde una organizacion criminal en las noches, que es cuando todo esta totalmente oscuro y nadie circula corcula por su destino, van a llorar y desahogarse junto a una tumba reciente.
!The Union and Gustabo Garcia
!Intento de one-shot triste
!Men...
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Un Audi tintado de negro mate era conducido en aquella noche melancólica donde la luna con su brillo que apenas se podía apreciar, las pocas estrellas que estaban en aquel cielo nocturno, el silencio en la ciudad que en algún momento estuvo teñida de felicidad y risas por doquier acompañaban a nueve chicos que emitiendo sólo suspiros y conteniendo un llanto lleno de dolor, frustración, impotencia y desamparo que iban hacia un desolado cementerio donde se encontrarían con la persona que les brindo cariño, contención, confianza y que sólo con existir hizo que sus inestables vidas fueran una aventura y lo más importante, se vuelvan agradables de vivir.
Esos nueve chicos compartían un sentimiento tan doloroso que no sabían como deshacer.
Pensaban constantemente como volver a esa vida con ese chico de ojos color cielo que, sin embargo, te lograban llevar al mismo infierno con una mirada y no resultaba desagradable, lo contrario, él te hacía sentirlo como si nada pasará, se podría decir que volvía el infierno un cielo donde reinaba la tranquilidad y felicidad, te hacía volar en muchas emociones.
Tan diferente e inexplicable.
También no hay que olvidarse de esos cabellos tan suaves y tan irreales -como toda su persona-. Su cabello era de un color oro, brillante pero no irritante a la los ojos.
"Tan perfecto" pensaban esos chicos al verlo, al tenerlo cerca, al brindarle cariño.
Pero, ahora, todo eso sólo eran recuerdos que vivían dentro de ellos, sus memorias, como cada sensación que antes los hacía sentirse sin ninguna preocupación, que los hacía olvidar que en cualquier día podría ser el último, esa adrenalina que no era tan fuerte como para enloquecer, esos hermosos sentimientos que ahora se sienten tan lejanos, tan imposibles de volver a vivir.
Es inútil negar que no lo necesitan de vuelta, necesitan sentir aquellos brazos dándoles un abrazo reconfortante que tantas veces les fueron concedidos, esos labios suaves y tan únicos, esas noches que no hacía falta hablar, solamente sentirse juntos el uno al otro -o a los otros- mientras miraban la oscuridad de la noche y oían las olas chocando con su curioso hogar. Lo necesitan a él, lo aman a él, sin importar los miedos y monstruos que tenga detrás, sin importar su peculiar personalidad y condición que muchos aprovecharon para poder dañarlo, sin importar los rumores que llegaron a sus oídos como supuestas advertencias que realmente estaban llenas de odio. Sin importar nada, ellos saben y entienden lo que le sucede y sucedió.
No cambiarían nada de él, absolutamente nada porque cada pequeña cosa de él desencadena otra haciéndolo más especial.
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