𝔎𝔞𝔰𝔰𝔞𝔫𝔡𝔯𝔞/ᴇʟʟᴀ ᴇʀᴀ ᴜɴᴀ ᴄᴏɴᴠɪɴᴀᴄɪóɴ ᴇxᴛʀᴀɴ̃ᴀ ᴇɴᴛʀᴇ ʟᴏ ᴘᴜʀᴏ ʏ ᴅᴀɴ̃ɪɴᴏ ᴘᴇʀᴏ ʟᴏɢʀᴀʙᴀ ᴘʀᴏᴠᴏᴄᴀʀ sᴇɴᴛɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ᴊᴀᴍás ɪᴍᴀɢɪɴᴀᴅᴏs ᴇɴ ᴇʟ ᴄᴏʀᴀᴢóɴ ᴅᴇ ᴀǫᴜᴇʟ ᴠᴀᴍᴘɪʀᴏ.
La menor de los Cullen, Kassandra Cullen se ve envuelta en un apasionado beso con su her...
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—Tú...
Kassandra miró al muchacho frente a ella, cabello negro, jeans negros apretados, una camiseta del mismo color y un pequeño cinturón en su brazo izquierdo, de cuero y negro.
Se acercó a ella y le acarició la frente, mientras aún su cabeza reposaba sobre las piernas de Edward.
—Hola mamá.—Carter tomó la mano de la chica y la puso en su mejilla.
—¿Qué?
—Hola mami.—Carter posó sus dedos por la mano de Kassandra dejando salir pequeños llamas verdes.
—Hola mamá.
—Tú...
La pelirroja comenzó a toser fuerte, demasiado para la impresión de su hijo, quien se asustó y le quitó de los brazos del chico.
—¿Quién eres?—Kassandra se llevó una de sus manos a la boca y sigo tosiendo, volvió a vérselas y estás estaban cubierta de su extraña sangre.
—Edward, busca a papá, búscalo.—Le dijo la pelirroja, éste no tuvo que hacerlo ya que el patriarca entro a la misma velocidad con la que fue llamado.
—¿Carter? ¿Qué diablos?—Carlisle se detuvo a verlo, tan solo por un momento, para luego continuar y acercarse a Kassandra, quien sufrió una arcada, vomitando más de su extraña sangre.
—Se esta sobre cargando, háganse cargo de Katrina.—Carlisle le orden ambos y tomo a Kassandra entre sus brazos.
La pelirroja no podía comprende nada, estaba aturdida, tan solo sentía como aquel liquido se deslizaba por su garganta, una y otra vez.
Grito, logrando que las cosas se movieran, poniéndose helada, y sus venas adquirieron aquel color característico, el contorno de sus ojos tomaba ese color Zafiro intenso, haciendo que su visión se distorsionará.
—K, te voy a ayudar no te preocupes.
El doctor recostó en la camilla a la chica, le rompió la blusa, para poder fijarse en las pequeñas venas de su pecho, buscando la indicada, tomo un bisturí, mientras buscaba la vena. A todo esto Kassandra soltó otro grito, logrando que los objetos a su alrededor se rompieran, se paso las uñas por la pierna rasguñándose estas.
—Jasper, ven y ayúdame.—Jasper apareció, sosteniéndole las muñecas, mientras Carlisle, intentaba parar la hemorragia.
—No puedo mantenerla así por mucho tiempo, es más fuerte que yo.—Habló el rubio para luego verle la cara a su hermana.
