Josan ''Kabuto'' Masakoji, de pequeño era un huérfano, pero fue acogido por el mayor científico del mundo, Juzo Kabuto. Quien nunca se casó y ni tuvo familia, instruyo al chico la ciencia, robótica, arqueología, entre otros ámbitos que un científico...
Renuncia de Derechos: Los personajes, Imágenes y Música no me pertenecen. Les pertenecen a sus respectivos autores. Lo que sí es mi única propiedad seria la historia del fic y los personajes originales por mi persona. Este fanfic fue hecho para entretener.
Está historia comienza en Tokio, Japón. Estaba un niño no más de 7 años, con características extranjeras: ojos esmeralda con expresión molesta, cabello negro y piel bronceada y una pequeña cicatriz en el párpado del ojo izquierdo; está en la ventana de un orfanato ya que años atrás sus padres desaparecieron en circunstancias desconocidas y para ese entonces no era más que un recién nacido y por no tener familiares vivos, fue puesto en adopción. Su nombre era Josan Masakoji.
A lo largo de los años se hice un niño problemático ya que no podía hacer amigos y los que siempre se acercaban eran los brabucones del orfanato que siempre lo molestaban y siempre se metía en peleas y lo catalogaron como un niño malo. Y una vez en esas peleas tuvo un accidente que le provocó esa cicatriz y que por poco no lo dejo tuerto. Cuando venían padres en busca de adoptar siempre pasaban de lago del niño, ya que siempre cada vez que tenía la oportunidad venían esos brabucones como si fuera su trabajo lo dejaban mal parado simplemente lo dejaban sucio, con moretones y con señales de pelea que con solo verlo se alejaban o no querían nada con el niño y siempre lo frustraba y sobre todo triste al punto del llanto.
Hasta que una noche como otra vendría un anciano que lo cambiaría el restó de su vida. El señor que no tendría más de 60 años tenía el cabello canoso, estaba en traje formal, tenía una gran cicatriz en todo el ojo izquierdo que ya que prácticamente no tiene ojo y que tenía un carácter muy excéntrico y algo inestable.
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Anciano: "Buenas noches, vengo a este orfanato para adoptar un niño. Ya que mis colegas y empleados me dicen que por no tener familia podría ser considerado un hombre cascarrabias y ese tipo de cosas. Y honestamente no estoy interesado en estas cosas pero si no hago esto, me seguirán molestando" dijo con mucha molestia en su voz.
Los encargados al escucharlo lo llevaron por dónde jugaban los niños en la parte trasera del orfanato, los niños corrían y saltaban por todos lados a lo que el anciano no hizo mas que una mueca de fastidiado. Los encargados llamaron a los niños para que se formaran al frente y que conocieran a su posible abuelo. Algunos niños se emocionaron mas que otros.
Niño 1: "Señor, señor escógeme por favor"
Niño 2: "A mi, a mi, quiero vivir con usted"
Niña: "Por favor abuelito elíjame, prometo no molestarlo demasiado"
Los niños se acumulaban alrededor del anciano y saltaban encima de este en sus brazos y hombros, y en el proceso cayo de espaldas sino que antes que los niños saltaron a tiempo evitando la caída y el pobre hombre solo pudo dar una mirada de muerte a los encargados a los que ellos solo se asustaron.
