La carta que te escribí

capitulo 3

Aurora

Me sorprendió que caí tendida como una piedra, pero a pesar de eso no he descansado nada. Aquí estoy mirando el techo a las 5:55am, la alarma está programada para las 7:05am, así que Bárbara no despertará aún, genial.

Si tan solo, hmm, cerraré mis ojos y contaré hasta 100... 1, 2, no, no. Es una tontería y una perdida de tiempo. Me levanté, fui al baño y de regreso tomé mi laptop y coloqué Netflix, busqué la serie que estaba viendo y la continúe.

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¡¿Qué!? ¿Cómo qué ya terminé la serie? O sea, me faltaba poco, pero no tanto, miré la hora en la laptop y 6:55am

— ¡Mierda! — murmuré

Fui directo al baño, ya que Bárbara tarda una eternidad haciendo no sé qué aparte de bañarse, anoche había guardado mi corneta aquí ya que sabía que la necesitaría al momento de bañarme, coloqué "No guidance" de Drake y me metí a la ducha.

Salí, me cepille los dientes y desenredé mi cabello ya que me lo había lavado, miré el reloj y eran las 7:20, no tardé mucho, salí del baño y ví a Bárbara restregar sus ojos.

— Hola madrugadora – Dijo en cuanto me miró con una mirada juzgadora, ella sabía mis problemas de insomnio.

— Buenos días, deberías pararte e ir a bañarte, tardas media hora dentro y media hora para vestirte y tenemos que estar a las 8:30am en el auditorio – Dije con un tono molesto.

— No puede ser que ya me estés regañando – Dijo en tono burlón mientras se volvía a acostar.

Le tiré mi almohada, se levantó y se fue al baño enfadada.

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— ¿Estás segura de que me veo bien? – Me preguntó Bárbara por décima vez mientras se miraba al espejo. Llevaba un lindo jean boyfriend, un hoodie color gris y unos tenis blanco.

— ¡Joder, sí! ¡Ya te lo he dicho diez veces! – Le dije molesta.

— Ok, vámonos entonces

Tomamos nuestras mochilas, anoche las habíamos dejado listas y tenían el horario dentro, así que la agarré y arriba tenía la información de la charla para novatos, decía que era en el auditorio de la escuela en el ala norte del campus, pero realmente estaba perdida.

– ¿Dónde rayos se supone que es el ala norte?– Dice Barbara confundida

– No lo sé, preguntemos – murmuré confundida

– Iré al café que está allá a preguntar – dijo señalando el puesto de café de la esquina, entusiasmada.

Sabía porqué lo hacía, habían chicos.

– Ok, me quedaré aquí -

De lejos ví que un chico venía en dirección hacia donde estoy, pero lucía molesto, me pareció realmente lindo, no lo sé, no pienso estas cosas, pero, tenía cabello negro y piel pálida, era de estatura mediana y cuerpo trabajado, pero no tanto.

–Ehm, hola – dije apenada cuando ví que estaba a menos de un metro de mí.

– Hola – dijo irritadamente, tenía unos ojos realmente lindos, eran entre verde y grises, un tono realmente extraño, pero lindo

– Ehm, ¿podrías decirme dónde queda el ala nort... - la pregunta quedó en el aire cuando rechino sus labios en forma de queja y molestia mientras miraba su teléfono.

Iba a hablar, pero su teléfono empezó a sonar otra vez y caminó. ¡Se fue, el malnacido, se fue! Visualicé a Bárbara caminando hacia acá con un chico, lo tenía agarrado del codo.

— ¡Genial! - murmuré molesta

— ¡Aurora, él es Ethan! – dijo con mucha alegría para mí gusto Barbara.

El chico de cabello y ojos castaños extendió su mano y yo la tomé, mientras ambos nos presentábamos.

– Ehm, Bárbara me dijo que tenías problemas para encontrar el ala norte, así que me ofrecí a guiarlas - dijo con una sonrisa mientras miraba de mi a Bárbara.

– Bueno, andando - murmuré.

Llegamos, él nos dejó en la puerta del auditorio mientras le daba su número a Bárbara, nos despedimos y decidimos entrar

– ¡Aquí vamos! - dije en un tono divertido mientras empujaba la puerta del auditorio.

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La charla culminó y Bárbara y yo decidimos ir a echarle el vistazo al campus, ah se me olvidaba, Ethan también vino, definitivamente Bárbara hace amigos muy rápido.

Estoy demasiado encantada con esta universidad, aquí se respira tranquilidad, lo que siempre he querido y debo aceptar que ni han llegado a mi cabeza pensamientos feos como los que siempre tengo; Después de un rato viendo la universidad Ethan se ofreció a invitarnos a cenar y a presentarnos su grupo de amigos, parte que quería evadir ya que no me interesa en absoluto conocer gente, eso ya es cosa de Bárbara pero después de que rogaran y rogaran accedí ¿Qué podría pasar?

Llegamos al lugar y Ethan se dirigió a una mesa directamente donde estaban 2 chicas y 2 chicos, los cuales nos presentó de una vez, Amanda, Nicole, Charles y este último me sorprendió, era el chico que me dejó con la palabra en la boca esta mañana y que ahora ya tenía nombre, Leon.