Simplemente sucedió

#10

Kara se había aferrado fuertemente a la cintura de Lena y Lena sostuvo el cuerpo débil y triste de Kara.
Ese momento fueron solo 5 minutos, pero para ellas fue una eternidad. Kara descubrió  que se sentía segura en los brazos de Lena, sentía que nada le podría pasar estando con ella, que Lena la cuidaba.
Lena pensó mientras sostenía a Kara y le daba cariños en el pelo y espalda: "No dejare que te hagan nada, no te harán daño, te lo prometo"

—¡Kara! ¡¿Estás aquí?!—Entró Cat de golpe a la habitación donde se encontraban aquellas mujeres— ¡Dios mío estás aquí, me tenías preocupada!— Miro la escena algo confusa y termino de hablar— Bueno, veo que no estabas tan mal acompañada— con algo de celos en su voz, que claramente Lena noto enseguida.

Ambas mujeres se separaron y se dieron la mirada más linda y tierna del mundo, con solo mirarse de dijeron muchas cosas.

—Si, estaba muy bien acompañada Cat— Kara miró a Lena y le dio una sonrisa— Perdón por eso, Cat, yo... te lo contaré después. ¿Ellos se fueron?— pregunto con la mirada baja
—Ajá, ellos ya no están acá. Pero Nia hablo con ellos y al parecer les dio tu número— Kara asintió
—¿Podrías dejarme sola con Lena un momento?— Kara necesitaba aclarar algunas cosas
—Está bien... ¡Cuídame a Kara, Lena!—
—Lo haré, tranquila— mira a Kara y le guiño un ojo, pero no se una forma provocativa, si no de una forma linda y tierna.

Cat salió del lugar dejando a ámbar mujeres solas en la habitación:

—Lena... no quiero que sientas lastima por lo que te conté, solo olvida lo que dije— Lena la miro con cara de confusión— Si soy adoptada, y toda mi vida las personas al saber esto me miraban con pena o lastima, y no necesito que tú lo hagas también. Tu eres tú, y no me gustaría saber que sientes lastima por la pobre Kara— Hablo tan rápido que Lena apenas pudo entender lo que le dijo
—Hey, mírame— Lena tomó las manos de Kara y habló —No siento ningún poco de lastima por ti, eso nunca. A ti te miro y lo único que siento es admiración y... — negó con la cabeza— nada, solo se que no siento lastima Kara. ¿Bueno? No pienses por un segundo que me das lastima— Soltó las manos de Kara, ahora sus manos estaban en el rostro de la rubia— Si quieres algún día me contaras tu historia, y podré conocer un poquito más de la mujer que me está volviendo loca— Lena se levanto y se dirigía a la puerta cuando las manos de Kara la detuvieron

—Lena espera...— Kara acercó su rostro hacia Lena— yo, o sea, tú me gustas y lo sabes— Acariciaba el rostro de Lena con sus dedos analizando cada parte de su bello rostro— Y también se que tienes novia, pero...— Sus dedos empezaron a tocar los labios de aquella chica, la respiración de Lena se empezó a cortar— Quiero volver a besarte, quiero besar tus labios, lo necesito— Kara miraba locamente aquellos labios que la volvían loca desde hace ya unos meses
—Entonces bésame, que yo también muero por que tus labios toquen los míos—

Kara acorraló a Lena en la puerta de aquella habitación y lentamente fue acercando su rostro al de Lena, ella quería disfrutar cada segundo de ese momento. Sus labios se juntaron, sus bocas danzaban increíblemente.
—Eres preciosa Kara— susurro Lena
Se daban besos cortos, pero llenos de cariño. Fueron interrumpidas por el teléfono de Lena
—Noo, no voy a contestar—
—Vamos, puede ser algo importante— Se separaron con muy pocas ganas. Lena al ver quien era su cara cambió totalmente, era su novia, la cual Lena deseaba no hablar ni verla nunca más.
—¿Que quieres? Estoy muy ocupada ahora— Hablo muy fría
—Amor por favor, déjame explicarte, dame otra oportunidad y verás que de verdad esta vez las cosas van hacer mejor— Andrea del otro lado sonaba bastante convincente— Dime donde estás y te paso a buscar—
—No, ya te dije que no. Ahora por favor no me llames durante un tiempo, tampoco me busques. Y tampoco vayas a la casa, si vas yo o iré— sin más corto la llamada y su mirada se dirijo a la chica rubia que estaba estática en la puerta de la habitación.