Capítulo 60 - La decisión

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Narra Ross:

Esta situación me estaba matando, porque no sabía que pensar, no sabía la decisión que iba a tomar Laura. Si es un no, no me voy a enojar ni nada, porque sé que me ama como yo a ella, pero por ahí como somos jóvenes, no querrá casarse ahora, es lo que pienso yo, no se la decisión que tomo, y si es un sí, bueno me pondrá muy feliz, me hará el hombre más feliz del mundo.

Ross: ¿Y amor? ¿Sí o no? – tomándola de ambas manos, así se relajaba porque la veía medio tensa – Mira si es no, no hay problema amor, entiendo que…

Laura: Si – interrumpiéndome.

Ross: ¿Si qué? – mirándola a los ojos.

Laura: Que si, quiero casarme con vos amor – sonriéndome.

Ross: ¡En serio amor! – ella asintió, la abrace de inmediato bien fuerte y luego nos besamos, un beso apasionado, y de felicidad – Me haces muy feliz mi amor – sonriéndole.

Laura: Aaww – acariciándome la cara – Y vos a mí amor – dándome un pequeño beso en los labios.

Ross: Entonces… - poniéndole el anillo – Ahora sí, todo mía – abrazándola.

Laura: Y vos todo mío amor – sonriéndome - ¡Espera! – separándose de mí y caminando de un lado a otro.

Ross: ¿Qué pasa amor?

Laura: Mañana ya me voy a Italia amor. ¿Cómo vamos a hacer para que no nos separen?

Ross: ¡Es verdad!

Laura: ¿Y ahora que haremos? No quiero separarme de vos amor – mirándome triste.

Ross: ¡Lo tengo! – sonriéndole - ¡Vamos a casarnos ahora!

Laura: ¿Qué? ¿Ahora?

Ross: Si.

Laura: ¿Y la fiesta, el vestido, la torta, el traje, los invitados…?

Ross: Lo hacemos después – interrumpiéndola.

Laura: ¿Y los testigos quien son?

Ross: En el camino lo decidimos. ¡Vamos! – agarrándola de la mano y abriendo la puerta del departamento.

Narra Laura:

Estábamos en el auto, yendo a casarnos, por lo menos me puse un vestido violeta que llegaba hasta las rodillas y un par de zapatos negros, me maquille en el auto y me pinte los labios color uva clarito, es que tuve que bajar a mi casa para buscar el documento si no, no nos podíamos casar, y de paso me cambie lo más rápido que pude. Pero antes de irnos a casar, tuvimos que ir a buscar a nuestros amigos, a Raini y Calum, porque decidimos que sean nuestros testigos.

Raini: ¿A dónde nos llevas?

Calum: Si, eso.

Ross: ¡Sorpresa!

Laura: Si chicos, esperen, ya verán – girando mi cabeza para verlos y sonriéndoles.

Ellos no sabían nada, solo le dijimos que queríamos ir a lugar los cuatro juntos, así que los íbamos a sorprender. Yo estaba muy nerviosa y ansiosa a la vez, por todo, primero por el casamiento secreto, bueno solo Raini y Calum lo saben que nos casamos hoy, y segundo por el viaje a Italia, igual con eso, estoy un poco más tranquila porque tengo a Ross a mi lado y jamás se ira de ahí.

Ross: ¡Llegamos!

Raini: ¿Eso es una iglesia?

Laura: Si.

Un amor de famaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora