El poder de la confianza: Sesshomaru y Rin

Capítulo 49: Desde siempre.

Advertencia: Alto contenido +18 🔥
Habrá un poco de todo. El celo hace ser más atrevida a Rin. 🙉  y acá pasa algo que en algunos fic he leído y es lo que pasa con los perros cuando andan con su pareja (después de terminar se quedan prensados un rato 😅) digo por si se preguntaban porque estos dos se quedan así mucho rato). Bye es todo, disfruta este cap donde voy a desquitar la espera y darle al Sessh-Rin mucha felicidad antes de Yashahime.

Comencemos...

Era una mañana agradable y los pájaros cantaban. Sin embargo, el futon se sentía frío para Rin. Cuando abrió los ojos, Sesshomaru no estaba. Eso le pareció muy extraño. Sin entender porque, se levantó deprisa y se vistió con lo primero que encontró. Salió de la recámara a buscar a su esposo. Aunque, por más que lo buscaba no lo encontraba. Resignada decidió ir al comedor para desayunar y para su sorpresa ahí estaba él. Sentado viendo al exterior. La chica eufórica corrió hacia él y se abalanzó para abrazarlo, quería montarse sobre el regazo del demonio, pero él se apartó impidiendo que hiciera eso.

Rin: ¿Qué pasa? - Desconcertada por el desaire.

Sesshomaru: No pasa nada. Sólo ten cuidado podrías caer. - Se excusó vagamente.

A ella eso no la convenció, pero lo pasó por alto. No todos los días puedes estar de buen humor, quizá era uno de esos días para su Señor. Fingiendo comprender, Rin actuó como si nada.

Rin: Tiene razón... Bueno, voy a desayunar y después vamos al jardín ¿no? - Con una sonrisa desencajada.

Sesshomaru: Si. - Contestó distante.

Un poco decaída, Rin se sentó y terminó de desayunar. Esta vez no hubo una plática divertida como otras veces. Su señor actuaba muy extraño y ella no entendía porque.

Rin: "Esto no está bien, el Señor Sesshomaru parece ocultar algo... No lo entiendo". - Pensaba mirando de reojo a su esposo que caminaba a un lado de ella hacia el jardín.

A pesar de estar camiando juntos, él mantenía distancia. No le prestó su brazo para que ella se sujetará como siempre lo hace. Llegando al jardín él se quedó sentado un poco alejado de ella sin decir nada. Era muy incómoda la situación y Rin se estaba molestando más que sentirse triste. Por eso en un arrebato se puso de pie dispuesta a irse de ahí, enojada al punto de querer llorar, pero se aguantó. Esa repentina actitud puso en alerta a Sesshomaru quien la tomó del brazo para retenerla.

Sesshomaru: ¿A dónde vas? Dijiste que querías estar aquí. - Hablaba como si nada pasara.

Con una expresión disgustada y seria, Rin volteó a verlo de una forma que jamás lo había hecho.

Rin: ¿De qué me sirve estar aquí? Si usted me evita, es distante y ni siquiera me deja abrazarlo. No tengo idea de que es lo que hice, pero no creo que haya estado mal. Así que dígame. ¿Qué es lo que le pasa Señor Sesshomaru? - Levantando la voz exasperada.

Sesshomaru: No es nada, Rin. - Con la mirada baja respondía sin ser convincente.

Rin: Entonces sueltéme. Si no va ser sincero conmigo, no tiene caso. - Forcejeó intentando irse, pero le fue imposible.

La discusión se tornaba muy áspera. En vista del daño que estaba provocando el Daiyokai, tuvo que decir sus motivos.

Sesshomaru: ¡No quiero volver a lastimarte! - Alzó la voz muy frustrado.

Ella se quedó pasmada unos instantes asimilando todo.

Rin: Pensé que anoche habíamos solucionado eso. - Ya estaba más tranquila.