Capitulo 24

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Muy buenos dias/tardes/noches etc. jajaja como andan? espero que bien, bueno al fin vengo con un nuevo capitulo, quiero comunicarles que ahora mismo estoy aprovechando para esscribir y asi poder actualizar asique vana  tener capitulos seguidos, lo que si necesito que comenten para saber si les esta gustando la historia y demas, antes que nada queria recomendarles una historia de una amiga mia, se llama ''La casa del lago Grunewald''  es una historia muy bonita y que vale la pena leer, en fin, no los molesto mas, los dejo leer tranquilos, graciaas!

PD: Porfa dejen un comentario sobre que les parecio el capitulo! :)

CAP 24

Juneau,  Alaska,  EE.UU.

Sábado 14 de julio del 2007.  5.30 p.m.

            Ya faltaba tan solo un mes para la exposición de cuadros, estaba tan nerviosa... mis tres cuadros estaban ya listos para ser exhibidos en la galería de ‘’Expression and Art’’  en el centro de la ciudad.

            Decir que estaba ansiosa por la llegada de la fecha era poco, saber que mis cuadros estarían ahí y que además alguien probablemente los compraría y con ese dinero podría ayudar a mis padres con todas las deudas me hacia realmente una mujer feliz.

            Desde que tuve esa última charla con Deborah sobre todo el tema de Andrew y sus padres puedo decir que realmente estoy más tranquila. Creo que de verdad me había sacado un gran peso de encima.

            Ahora solo quedaba hablar con Charlie y Kate, y después con  Andrew claro, sé que no iba a ser para nada fácil.

            Pero antes que nada tenía que encontrar la forma de crear un buen plan para que todo saliera bien.

            Con Deborah pensamos que el día en que sea la gran exposición de arte,  lo más probable es que Andrew se encuentre con sus padres ya que tanto él como Charlie y Kate estarían en ese momento para acompañarme.

            Se que ya es indudable que verdaderamente estoy enamorada de Andrew y quizás el sienta lo mismo, nuestra relación ha ido cada vez mejor y estamos más unidos que nunca,  solo espero que llegue el día en que todo se solucione, no más secretos, ni mentiras…

            Pero por otro lado también estaba todo el tema de Macy, que desgraciadamente ella también era una de los involucrados en esta historia.

            Realmente esto parecía un laberinto que nunca terminaría.

-Sophie... cariño ¿Todo está en orden? - decía Kate desde el pasillo mientras yo salía de darme una ducha y todos mis pensamientos de hace unos minutos se desvanecían.

-Si Kate, no te preocupes... ¿Sucede algo?- contesté mientas terminaba de envolver mi cuerpo en una toalla y cogía otra para secarme el pelo.

-Oh no cariño, tu telefono ha estado sonando desde hace 40 minutos.

        Wow, realmente sí que me había distraído con mis pensamientos.

-Ah, sí, cuando termine aquí saldré a ver, no te preocupes Kate.

-Está bien – dijo, y al instante hablo de nuevo- iré a preparar las cosas para la cena – continuo mientras se alejaba por el pasillo.

        ¿Quién habrá estado llamando tanto? Seguro será mamá, hace unos días que no la llamo, debe estar muy preocupada.

        O tal vez sea Andrew…

        Después de secar mi cabello con el secador y tratar de que quedara prolijo y presentable, me vestí y fui a ver mi teléfono que se me había quedado en la mesa del comedor después de almorzar.

         Cuando me fije las llamadas perdidas eran la gran mayoría de Deborah, decidí llamarla al instante.

-¿Hola? – decía la pelirroja con una voz risueña desde el otro lado de la línea.

-Deb, perdón por no contestar, estaba tomando un baño y se me olvido el teléfono en… -me interrumpió.

-Si si no importa, oye tengo una noticia de último momento que te puede interesar. – dijo con un tono de picardía.

-¿De verdad? ¿Qué es?

-No puedo contártelo por teléfono, ¿te parece que nos encontremos en el café de la otra vez? ¿A las 7 p.m.? Tengo un pequeño descanso antes del turno de la noche.

-Ehh… si si claro… te veo allí a esa hora. – dije algo titubeante. – Nos vemos luego.

-Nos vemos.  – contesto y cortó.

        ¿Qué será eso tan importante que tendrá para contarme?

        Tras plantearme esa pregunta me dirigí hacia donde se encontraba Kate.

-¿Cómo va todo Kate? – dije mientras apoyaba mis manos en sus hombros por detrás y apoyaba mi mentón en mi mano izquierda para observar mejor que es lo que estaba haciendo.  

-Oh sophie, eres tu… bien, la cena de esta noche será deliciosa – hizo una pausa- ¿Todo bien con las llamadas?

-Si si no era nada de qué preocuparse, oye, quizás salga antes de la cena, no te molesta ¿verdad? Prometo llegar a tiempo.  

-Claro dulzura, pero, ¿Segura que todo está bien?

- Si, no hay nada de qué preocuparse, enserio. – conteste mientras empezaba a alejarme. - ¿Y Charlie?

-Ha salido a comprar algunas cosas para esta noche.              

-Oh, está bien.

         Me dirigí a mi cuarto para recostarme un rato en mi cama y escuchar música con mi ipod.

        Llego un momento en el que me quede profundamente dormida, no sé como sucedió.

         Al despertar, eche un vistazo a la hora y note que eran las 6.30 p.m. 

        Recordé de mi encuentro en el café con Deborah y opte por levantarme rápidamente de la cama.

          Me pinté ligeramente los labios con un poco de brillo y luego me puse un poco de rímel en los ojos, no me gustaba andar con mucho maquillaje, prefería más lo natural. 

        Baje hacia lo cocina y cogí uno de los emparedados que Kate había hecho para la cena.

-¿Ya te vas pequeña? – pregunto Kate con dulzura.

        Eche un rápido vistazo al reloj de pared que se encontraba ahí en la cocina, marcaba las 6.45 p.m.

-Si… me lleva unos minutos el viaje desde aquí al centro asique será  mejor que me vaya ahora.

-Está bien cariño. Conduce con cuidado.

-Lo hare.

        Dicho esto salí rumbo hacia la puerta de entrada donde me encontré a Charlie.

-¡Sophie! ¿Vas a salir?

-Hola Charlie, si, voy a salir hacia el centro, me encontraré con una amiga.  

-Oh, de acuerdo, pero te recomendaría que antes le eches un poco de gasolina en alguna estación a Bear, creo que te alcanzara  para llegar hasta allá pero necesita una recarga.

- Claro, no me olvidare, nos vemos.

Y así subí al Nissan de Charlie, me moría de ganas por saber qué era eso tan importante que tenía Deborah para contarme.

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