Capítulo 3

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Ashley

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Ashley

Hoy no ha sido un día muy bueno, me han interrumpido en la biblioteca mientras leía, la clase de biología fue realmente aburrida, no le preste atención a nada, pedí permiso a la profesora para ir al baño diciéndole que no me sentía muy bien del estómago, camine por los pasillos hasta llegar a la entrada del tabloncillo y allí comencé a leer de nuevo, en realidad solo había salido de la clase para poder continuar la lectura, eso no afectaría mis notas pues era una de las mejores en esa materia.

Luego de otro turno más de clases, llego la hora de merienda, fui hacia el baño y luego busqué a mis amigas, ya en la entrada de la cafetería de la escuela: lugar donde gobiernan los típicos populares, es decir los deportistas y alumnos conocidos, no tiene nada de especial, solo son mesas y sillas, pero por alguna razón desconocida es uno de los lugares más importantes. Tomé un sándwich de queso y un jugo, fui hacia las mesas, me despedí de las chicas y fui para mi lugar seguro, debajo de las gradas de la cancha donde los jugadores de fútbol practican cada tarde, por suerte estaba vacía y tenia calma.

Termino de comer y me dirijo hacia la biblioteca para terminar de hacer una tarea de historia que era la asignatura que me tocaba después del descanso. Al entrar veo a la empleada y le pido los libros necesarios para hacer la tarea, me los entrega y voy para una de las ultimas mesas, pero luego de un rato comienza a sonar por los altavoces la canción que da inicio al programa de radio más aclamado por todos, incluyéndome, dejo el libro a un lado y centro toda mi atención en el programa.

—Buenos días estudiantes de la mejor escuela del país, ya saben quién soy, pero para los que no lo saben, soy su cupido o bien pueden llamarme chico de la radio, hoy estoy un poco feliz pues todo lo planeado me ha salido bien, llegue en la mañana y encontré mi casillero cargado de notas para leer el día de hoy, solo voy a tomar algunas pues mi tiempo es limitado, mientras las escojo los dejo con una canción que amo, espero les guste. Comienza a sonar Let me down slowly de Alec Benjamin y Alessia Cara por los altavoces. Amo esa canción también, chico de la radio.

Esta noche esta fría en el reino Puedo sentir como te desvaneces Desde la cocina hasta el lavabo del baño, y Tus pasos me mantienen despierto No cortes conmigo No me eches No me dejes aquí hasta perderme Una vez fui un hombre con dignidad y gracia Ahora me deslizo a través de las grietas de tu frio abrazo Así que por favor Por favor ¿podrías encontrar una forma de decepcionarme lentamente? Espero que puedas mostrarme un poco de simpatía Si quieres irte me sentiré tan solo Si vas a dejarme, cariño, decepcióname lentamente

Comienzo a tararear la canción hasta que llega a su fin, luego vuelve la voz del locutor que comienza a leer alguna de las notas, algunas son declaraciones de amor y otras son puros chismes, me gustaría tener a alguien para mandarle esas notas o recibirlas de alguien. El chico se despide de toda su audiencia, salgo rápido de la biblioteca para ver si logro ver quien es ya que la radio quedaba a solo unos pasos de esta, pero al llegar a la puerta no pude ver a nadie, siempre tan misterioso.

Se acaba la hora de clases y voy para la entrada a esperar a las chicas, Olivia se quedara en un taller, Mia tiene entrenamiento con el equipo de futbol y yo aún no me había decidido sobre entrar o no al equipo de natación, siempre me gusto nadar y competir desde que era niña pero me cuesta trabajo tomar una decisión, cuelgo bien mi mochila en ambos hombros y camino hacia la casa, siento que alguien viene detrás de mí, me giro y veo a un chico con una chaqueta negra, el mismo uniforme que llevo puesto y unos audífonos, acelero un poco el paso pero veo que el suyo lo mantiene constante, al llegar a la esquina de mi casa veo que este sigue la calle y dobla en la próxima esquina, soy una paranoica, tengo seria obsesión con los robos y asesinatos.

Llego a la casa y no hay nadie, en la puerta del refrigerador hay una nota de mi madre que avisa que salió de viaje y que papa llegara tarde, subo hacia mi habitación dejo la mochila en la cama, me quito el uniforme y voy a darme una ducha, luego busco en el armario algo cómodo para ponerme, escojo un short ancho gris y una blusa a juego, suelto mi cabello, pues odio tenerlo recogido, tomo el ordenador y subo hacia la biblioteca, es el ático de la casa que fue transformado en biblioteca por mis padres, solo se tiene acceso desde mi habitación, este es mi lugar seguro de la casa, suelo pasar horas aquí sin necesidad de nada más, los libros me llevan a otra galaxia, son mi forma de escapar de este mundo que no siempre es agradable. Es realmente amplio este lugar y lo más hermoso es su entrada de luz, tiene ventanas por todos lados lo que hace que por las noches se pueda ver el místico cielo con todas las estrellas y la luna.

Reviso la solicitud que envíe al periódico de la escuela para pertenecer a él y así poder obtener puntos extras para mi universidad que, aunque me falte un año debo ir acumulándolos, me aceptaron y ya tengo trabajo por hacer, me llego un archivo que debe ser mi primera investigación. Aquí dice que tengo que investigar sobre uno de los alumnos más influyentes de la escuela, lo que no dice su nombre ni ningún dato que pueda describirlo físicamente, solo dice Chico de la radio, locutor de la radio escolar, ya tenía algo investigado acerca de él así que puse manos a la obra y ordene todas mis ideas.

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Espero les guste el capitulo. Les tengo una noticia.... Hay doble actualización esta semana debido a que el domingo es mi cumple... Los quiero

Hey, Chico de los AudífonosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora