HAPPIER | H.S.

S I N O P S I S

S i n o p s i s

Olivia aun trataba de comprender las palabras que habían salido de los labios de su novio, o bueno, para ser realistas, de quien ahora era su ex novio.

No comprendía en que momento las cosas se habían salido de control.

No comprendía en que momento todo se le fue de las manos.

Acostada en la cama de Harry, aun usando su camisa blanca, trató de entender cómo es que, después de haber tenido uno de los mejores sexos, su novio de más de tres años, estaba terminando su relación.

- ¿Esto es por ella? - pregunta Olivia desde su lugar, observando como Harry, solo la mira con pena

Los ojos de Olivia no tardaron en llenarse de lágrimas cargadas de dolor y pena, sin embargo, no se iba a permitir derramar una sola de ellas frente a él, no cuando sabía perfectamente cuál era la razón por la que estaba mandando todo al carajo.

Se sentía humillada y, rápidamente, sintió su cuerpo frío y tímido ante la presencia de él.

Notó como Harry se removía incómodo tratando de encontrar las palabras correctas para manejar la situación, captó el movimiento nervioso de sus manos, aquellas que hasta hace unos minutos, habían recorrido cada curva de su cuerpo mientras hacían el amor por última vez.

- ¿Ahora es ella a quien amas? - vuelve a preguntar, pero una vez más, el lugar se llena de un oscuro silencio

Y pronto, Olivia comienza a sentirse una completa extraña dentro de ese departamento en el que había pasado los mejores días de su vida junto a la persona que más amaba.

Necesitaba irse de ahí.

Con una velocidad que ni ella reconocía, se puso de pie de aquella cama con sábanas desordenadas y, con manos torpes, comenzó a levantar del suelo toda su ropa; en algún momento, una pequeña risa irónica sale de sus labios cuando recoge aquel conjunto negro de encaje que había comprado especialmente para su novio.

"La peor inversión de mi vida", pensó.

Con la vista nublada, logra salir de la habitación sintiendo los ojos de Harry siguiendo cada uno de sus movimientos.

- Olivia...- comenzó a decir el británico - Por favor no te marches así, déjame explicarte

Pero no recibió una respuesta.

Lo cual le preocupó más de lo que deseaba.

Harry sabía que cuando Olivia no emitía ni una sola palabra, era porque realmente estaba destruida.

Antes de ser pareja, habían sido grandes amigos, y el cariño que él sentía por ella, iba más allá del noviazgo que había surgido entre ellos. Él de verdad la amaba, pero no supo identificar en qué momento ese amor volvió a ser solo de amistad.

Harry, dentro del pánico que comienza a emerger en su cuerpo, trata de acercarse a ella con la intensión de sujetarla por última vez y poner las cartas sobre la mesa.

Ella más que nadie merecía una explicación.

Pero lo único que recibió, fue un chorro de vino tinto sobre su pecho.

Olivia se había dado la vuelta con rapidez y había tomado una de las copas con vino que habían dejado sobre la mesa instantes antes de sumergirse en besos y caricias pasionales. Ella no dudó ni un segundo en arrojar el líquido sobre Harry.

Aprovechando la sorpresa en el rostro de su ex novio, ella camina hasta la entrada del departamento con toda la intensión de marcharse de aquel sitio que ahora ardía en llamas de odio y rencor, pero esta vez, no logró su cometido, pues Harry pudo tomarla por el codo para girarla y verla atentamente.

- No puedes irte así, Liv - susurra él sintiéndose apenado, arrepentido - Por favor, escucha lo que tengo que decirte y después...

- Ahórrate tus palabras - Olivia encuentra el coraje para interrumpirlo y hablar entre dientes - No te atrevas a decir alguna excusa, tu silencio hace unos momentos me lo aclaró todo

Con un tirón, logra zafarse de su agarre y consigue abrir la puerta principal.

- Olivia, lo siento demasiado - Harry pronuncia - Yo nunca quise que mis sentimientos cambiaran

- ¿Sabes una cosa? Todas mis amigas me lo advirtieron, me dijeron que en cualquier momento tú te enamorarías de ella, me dejarías y...- Olivia se ve interrumpida por el nudo que hay en su garganta

- Yo te quiero, Olivia, jamás podría dejar de adorarte - dice Harry cuando el silencio se ha prolongado por varios segundos

- Sólo para que lo sepas, nunca diste lo suficiente por esta relación - pronuncia con la mandíbula apretada deseando con todo su corazón lastimarlo así como él acababa de hacer con el suyo - Y dudo mucho que lo hagas con ella

El impacto de sus palabras logra su objetivo y consigue salir del departamento con pasos torpes debido a la urgencia por llegar al ascensor y perder de vista al chico de ojos verdes y cabello ruloso.

Es consciente de que lleva encima solo la camisa de Harry y agradece que ésta logra cubrir su trasero.

Ya tendría tiempo para cambiarse dentro del ascensor, no podía siquiera vestirse con él frente a ella, no cuando ahora se sentía avergonzada de su cuerpo y de la mirada de él.

- ¡Olivia! - Harry grita por última vez, pero ya es muy tarde, pues cuando sale disparado en la dirección que ella ha tomado, solo consigue ver cómo el delgado cuerpo de su ex novia desaparece detrás de las puertas del ascensor

Se odia, se detesta por haber escogido justo ese momento para hablarle sobre los sentimientos inexistentes hacia ella.

Olivia se había presentado esa noche con una botella de vino y con la sonrisa más radiante que le había visto; había llegado de sorpresa para informarle a su novio que la habían aceptado en un intercambio europeo que era de suma importancia para su educación y experiencia profesional.

Era un patán.

Porque había visto como la felicidad de la pobre chica se iba por la puerta en cuanto pronunció las palabras "Tenemos que hablar" y después "Esto no puede continuar, lo siento".

Era un patán.

Porque ella pensó que todo se debía a su posible marcha del país, incluso, había dicho con rápidas palabras que podía negarse al intercambio si el tema de la ruptura se debía a la distancia que habría entre ellos.

Era un patán.

Porque la Olivia que lucía esa bella mirada radiante y el cabello despeinado que la caracterizaba después de hacer el amor, se había marchado para abrir paso a la Olivia de mirada triste y rostro decepcionado.

Era un patán.

Porque se había enamorado de otra mujer aun estando con Olivia.

Harry regresa a su departamento y cierra la puerta detrás de él, tratando de conseguir que con esa acción, todo el mundo fuera desaparezca.

Pero no es así, porque, enmedio de la lluvia y con su ropa puesta, Olivia camina por las calles de Nueva York con su alma pendiendo de un hilo y los labios temblando, no por el frío de la lluvia ya que su cuerpo realmente no sentía nada, sino por el llanto contenido.

.....

¡Hola a todxs!
Bueno, me moría de ganas por mostrarles un poco sobre este nuevo proyecto que voy a comenzar; espero les guste y juntxs podamos continuar en esta historia.

Si vienes de Your Type, muchas gracias por continuar conmigo; y si vienes por tu cuenta, ¡bienvenidx! espero que este espacio sea agradable para ti.

Te agradecería si me ayudas con tu voto y tu comentario
TPWK