All for you

Capitulo 1

Se movió con prisa por su apartamiento tomando diferentes cosas de su habitación y la sala mientras cada cierto tiempo pasaba al comedor para tomar una bocanada de su desayuno. Se había levantado tarde y ahora estaba realmente apurada para ir a la escuela. Miró su mochila asegurándose de tener todos sus libros para el día y al ver que estaba lista. Su apartamento estaba algo lejos de la universidad y para su mayor problema es que su camino a la escuela era peligroso por la gran cantidad de pandillas que había alrededor

Lanzó su plato ahora vacío al fregadero y salió corriendo de su apartamento mientras cerraba la puerta detrás de ella. Ajustando su mochila empezó a correr mientras esquivaba a todos los que estaban caminando por la banqueta. Mientras corría alzó su mano mirando su reloj de muñeca antes de suspirar levemente con alivio. Aún estaba a tiempo

Lentamente empezó a disminuir su ritmo hasta que terminó caminando. Un suspiro salió de sus labios, pero rápidamente se quedó quieta cuando vio a un grupo de hombres en un callejón ligeramente oscuro. Parecían estar hablando entre ellos, pero con solo un vistazo sabía que eran peligrosos. Haciendo una pequeña mueca miró a su alrededor notando que era la única que estaba mirando el callejón

Curiosa y sin poder evitarlo regreso la vista a los hombres notando rápidamente a uno. Ahí había un hombre que reconocía, era alto, de cabello plateado y ojos dorados. Siempre con una mirada fría en su rostro y cada vez que lo miraba tenía heridas en su cuerpo, como si siempre estuviera peleando

Sus miradas se encontraron y sin saber que hacer le dio una pequeña reverencia antes de salir de ahí con pasos tranquilos. Sin saberlo el se le quedo viendo en silencio hasta que la perdió de vista y regresar la mirada a los hombres que tenía en frente

Kagome miró detrás de ella un par de segundos antes de seguir caminando con calma. Aunque no lo conocía ni sabía su nombre él no parecía ser alguien malo, había visto cómo había ayudado a un par de personas antes, pero, aunque no parecía ser malo estaba en malos lugares y también estaba rodeado de muy mala acompaña

Miro detrás de ella una vez más viendo como todo el grupo de hombres salían del callejón asustando a varias personas que estaban pasando por ahí cerca. Sonrió ligeramente antes de seguir su camino, muy pronto llegó a la universidad 

Corrió a su clase y se sentó en su asiento mientras suspiraba con alivio en el momento en que vio entrar al profesor. Mientras el profesor empezaba a acomodar sus cosas revisó su horario y suspiro, ese día saldría realmente tarde. Amaba sus clases de enfermería, pero a veces era realmente difícil y cansado el horario que tenían

Mientras escribía las cosas que el profesor empezó a dictar, escuchó la conversación de sus compañeras que tenía al lado

“¿viste al hombre que estaba cerca de la universidad?”

“lo vi, el de cabello plateado, ¿verdad?” kagome las miro de reojo “era realmente sexi, pero parecía ser un completo peligro, ¿viste la cicatriz de su cara y brazos? Sólo significa problemas y no vale la pena, toda su bella piel completamente arruinada”

Las vio asentir estando de acuerdo con sus propias palabras

“lastima, parecía ser un buen partido”

Después de eso se quedaron empezaron a hablar entre ella en susurros que ya no pudo comprender. Sabía exactamente de quién estaban hablando, pero aun así estaba un poco molesta por lo que habían dicho, sabía que, aunque tuviera cicatrices no significaba que fuera malo o feo. Soltó un pequeño suspiro y las ignoró completamente a favor de hacer los ejercicios que había puesto el maestro

Después de varias horas por fin se habían acabado las clases. Se quedó frente a la puerta de la entrada y se estiró suavemente antes de alzar la vista al cielo, estaba empezando a oscurecer ya que eran alrededor de las 5pm. Haciendo una pequeña mueca empezó a caminar directamente al mercado que estaba cerca de su apartamento

Con rapidez empezó a comprar algunas cosas necesarias para hacer la cena y unos cuantos bocadillos para comer después. Sonriendo al amable cajero tomó su bolsa del mandado y salió de la tienda con satisfacción. Ajustó su mochila y empezó a caminar hacia su apartamento

Pero cuando paso por el mismo callejón que había visto en la mañana se detuvo y giró su rostro en esa dirección mirando con curiosidad y un poco de temor al ver que estaba completamente oscuro. Hizo una pequeña mueca y estaba por irse cuando noto algo junto a una de las paredes del callejón, parecía ser una figura agachada contra unos botes de basura completamente inmóvil. Debatió sobre si acercarse o no durante un par de minutos, pero al final su curiosidad ganó haciendo que se acercara

Se movió ligeramente nerviosa y se adentro al oscuro callejón mientras apretaba el agarre sobre su bolsa de mandado. Si alguien intentaba atacarla solo lo golpearía con la pesada bolsa y correría, pero contrario a sus pensamientos temerosos, solo vio al mismo hombre de esa misma mañana recargado contra la pared mirando el suelo, pero cuando escucho sus pasos alzó la mirada para verla

Lo miro directamente a los ojos. Sus ojos eran tan dorados como el sol, pudo ver un par de cicatrices en su rostro, una que corría desde su ceja izquierda hasta su pómulo y otra en su mejilla derecha. Aparte de todo eso pudo ver que uno de sus ojos estaba morado, tenía varios raspones en su frente, mejilla, y también en sus brazos, junto con varios moretones

“¿estás bien? ¿necesitas algo?”

Inmediatamente la preocupación ganó sobre la inseguridad y sin poder evitarlo se arrodillo a su lado, pero cuando estaba a punto de agarrar una de sus manos para inspeccionar las heridas él se apartó de ella

“vete”

Kagome lo miró sorprendida. Toda su ropa estaba sucia, rota y tenía algo de sangre en ella, así que le preocupaba

“pero tus heridas…”

“no necesito nada de tu ayuda”

Su voz era tan fría y dura como el hielo mientras la miraba. Kagome hizo una pequeña mueca y alzó una de sus manos para intentar una vez más tomar su brazo, pero escucho un gruñido de hambre. Abrió los ojos ligeramente sorprendida y giró su rostro para verlo, solo para que él apartara la mirada de ella mientras ponía una mano sobre su estómago, al parecer su estómago había rugido por el hambre

“¿has comido algo? ¿tienes hambre?”

El regreso su mirada para verla y después de un par de segundos hablo

“solo vete de aquí”

Después de decir eso empezó a levantarse lentamente de donde estaba sentado. Suspiro con decepción al verlo irse, pero rápidamente saco un par de panes que había comprado y una botella de jugo antes de acercarse a él y con un movimiento rápido puso las cosas en sus brazos

“si no me dejas curar tus heridas al menos come esto”

Lo vio mirarla con un rostro inexpresivo, pero ella solo le dio una sonrisa antes de irse rezando porque él se curará las heridas y comiera algo. Mientras kagome salía del callejón, un par de ojos dorados la siguieron antes de bajar la mirada a la comida que estaba en sus manos. Miró a su alrededor antes de sentarse y lentamente abrir uno de los panes y darle una mordida sintiéndose aliviado al tener algo de comer