Algunos minutos pasaron y Alastar no sabía cuanta de la información que envió llegó a recibir Marduk antes de tener el infarto cerebral. Pero dada la estática y enorme sonrisa de satisfacción que tenía su viejo amigo en su rostro, podía intuir que había sido más que suficiente para cumplir con su último deseo.
Un sujeto robusto, de casi dos metros de altura, entró bruscamente en la habitación en ese momento. Era Boltov, el asistente principal de Marduk.
—La marca de mi señor se está desvaneciendo... ¿mi señor está muerto? —preguntó Boltov, con su tosca voz, señalando su brazo en donde una marca en forma de pentagrama parecía esfumarse rápidamente. El enorme sujeto lucía devastado mientras miraba el cuerpo de su señor que yacía inmóvil en la cama.
Alastar asintió con la cabeza con pesar y sentenció:
—Tu señor me pidió que te recuerde que debes iniciar los ritos funerarios que te indicó cuanto antes.
Boltov tenía los ojos sollozos ahora. Originalmente había sido un esclavo que fue comprado por una moneda de oro; pero tuvo la suerte de que su dueño fuese alguien generoso como Marduk, quien que lo cuidó, alimentó, entrenó, enseñó y finalmente lo ascendió, para permitirle servir como su hombre de confianza en muchas tareas de cierta importancia. O, al menos, así lo consideraba él.
—Has cuidado bien de tu señor durante todo este tiempo, dejaré que te despidas de él a solas —indicó Alastar mientras recogía la botella del fino licor en la estantería de la izquierda que su amigo le dejó como regalo de despedida. Luego, se marchó en silencio de la habitación, él también necesitaba hacer su propio duelo a solas.
Media hora después...
Alastar se encontraba bebiendo solo, sentado en un acantilado, mientras miraba el horizonte lejano con una triste mirada. Los viejos recuerdos de momentos junto a su difunto amigo se aparecían en su mente constantemente. Su tristeza y melancolía no le permitía disfrutar al máximo del sabor del licor especial que le regaló Marduk.
Simultáneamente, en una oscura y antigua cripta había un salón repleto de piedras brillantes incrustadas en las paredes y dibujos de círculos mágicos de todo tipo en el suelo. En el medio del viejo salón se encontraba una gran roca rectangular sobre la cual reposaba el cuerpo del mago Marduk.
Boltov se encontraba realizando con precisión todos los rituales que su maestro le había enseñado y en este momento esparcía un fino polvo de color azulado sobre el cuerpo sin vida del mismo. Ya era el anteúltimo paso antes de finalizar todo lo solicitado. Finalmente, solo quedaba colocar sobre la cabeza del difunto una extraña corona de huesos, que había sido cuidadosamente preparada de antemano, y con eso terminaría el último paso del último ritual. Pero, al momento de concluir, el ritual pareció salirse de control totalmente...
~ ¡Trish! ~
Por alguna razón, la corona de huesos se expandió de inmediato al entrar en contacto con la cabeza de Marduk, clavándose parcialmente en su cráneo, y una poderosa corriente energética arrojó al confundido Boltov varios metros hacia atrás; estampándolo contra la dura pared de piedra del salón principal de la cripta.
Al mismo tiempo, Alastar sintió una poderosa perturbación en el maná circundante de la zona. Algo estaba afectando severamente el área a varios kilómetros a la redonda. Alarmado y confundido por la repentina fuerza emergente, intentó ponerse de pie para ir a investigar, pero solo para descubrir que no podía controlar bien su cuerpo. De hecho, tropezó y calló de costado al intentar reincorporarse. Su rostro quedó a escasos centímetros de la botella de licor vacía mientras analizaba sobre su situación actual lo más rápido que podía; pero no tardó en notar que su mente estaba tan atrofiada como su cuerpo.
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Portales y Reliquias
FantasyEsta es la historia de Neil Shan, un veterano que sirvió al imperio durante toda su vida hasta lograr obtener una excelente reputación y un merecido retiro en paz para vivir junto a su familia. Pero inesperadamente se convirtió en un traidor que est...