Una nueva aventura

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Hola, mi nombre es Serena Tsukino, tengo 18 años y hoy es mi último día en Japón.

Las chicas y yo fuimos de compras para tener todo para el día siguiente. Volar a Estados Unidos iba a ser cansado, pero teníamos que bajar de ese avión como divas que van a conquistar otros horizontes, segun Mina.

Esa noche la pasamos en mi casa, aunque nuestros padres insistían en que debíamos descansar para el largo viaje, decidimos hacer una pijamada.

Era mi última noche en esa habitación, quiza regresara en vacaciones, pero a partir de ahora, y por los próximos tres años, mi hogar seria el dormitorio de la universidad.

Así es, una universidad en Estados Unidos, donde podria cumplir mi sueño. Y mucho mejor, estar junto a todas mis amigas y junto al amor de mi vida.

Así es. Darién también estaría ahí, junto con Andrew, quiénes ya habían entrado a la universidad desde hace dos años.

Eran casi las 3 de la mañana cuando nos dormimos. Nos la habíamos pasado hablando de nuestros sueños. Amy, por supuesto, se convertiría en una doctora reconocida, con sus notas, nisiquiera necesitó tomar el examen de admisión. Lita no estaba tan interesada en la universidad, pero si pensaba poner su tienda, tendría que conocer algo de administración junto a Rei, quien pensaba heredar y mejorar el negocio del templo de su abuelo. Mina pensaba estudiar actuación, algún día se convertiría en una famosa actriz. Por mi parte, una vez supe que no se me daba mal diseñar, y descubrí que el diseño de modas era mi pasión.

Conversamos y reimos, contábamos los segundos hablando de lo que haríamos en cuanto llegáramos al país de los rascacielos.

Por supuesto al día siguiente nos quedamos dormidas, y apenas pudimos despertar cuando Amy llevó a mi madre a la habitación, después de pedirle desesperadamente que le ayudara a despertarnos.

Había sido bastante bueno seguir su consejo y preparar las maletas desde un día antes. Así solo tuvimos que subirlas al auto, y después mi padre nos llevó al aeropuerto.

La despedida fue bastante emotiva. Nuestras familias lloraban y nos abrazaban antes de vernos partir hacia el avión.

Y así comenzó nuestra nueva vida, a partir de ahora sería una universitaria. A partir de ahora sería una nueva aventura.

Sailor Scouts salvadas por la campanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora