Dulce tentación (Sin Corregir)

Capítulo 17

¿Celos?

Nos separamos por falta de aire, nuestros pechos subían y bajan con rapidez, juntamos nuestras frentes y cerramos los ojos disfrutando del momento, solo éramos el y yo.

–Castaña..

–Dimitri...

–Te.... - la voz de una chica lo corto.

–¿Dimitri eres tu? - una chica preciosa apareció de la nada, no sabía quien carajos era, pero había interrumpido a mi chico.

–Meredith.... - Santa mierda. - que haces aquí - dijo cortante.

–E venido a verte, e visto que has ganado esa pelea en París, siempre supe que llegaría algo - ando hacia el, me dio un empujó y le abrazo, un abrazo el cual el no correspondió, se la quito de encima y me acerco a el. - ¿quien es ella?

–Mi chica. - mi chica, que bien sonaba cuando lo decía el.

–¿Una de tus putas? Ya va siendo hora de que te centres chico, vuelve conmigo, te prometo que nada malo va a pasar esta vez.

–Te cuidado con lo que dices Meredith. - fue a darle la mano y Dimitri la apartó de un tiron.

–Vamos a hablar los dos solos, tranquilos, sin nadie que nos moleste. - Meredith me miro esperando a que me fuera.

–Tiene razón - dije sin pensar - deberías hablar con ella y aclararlo todo. - dije sin mirarlo - y deja de mirarme así, no tienes que pedirme permiso para hablar con ella - le mire a los ojos e intente sonreír - búscame cuando termines - fui a darle un beso en los labios pero termine dandoselo en la mejilla.

Me fui con Isa y Bea las cuales me estaban mirando desde el mismo sitio donde las deje cuando corri hacia Dimitri.

–¿Por que lo dejas con esa arpía? - dijo Bea.

–Tienen que hablar...

–¿Celosa querida Anya?

–De esa zorra, que por cierto es preciosa y..... Joder.... ¿Es preciosa la habeis visto? - me senté en la primera silla que vi y coloque mis manos en mi cara.

–Será todo lo preciosa que quieras, pero el te mira a ti mientras está hablando con ella. - dijo Bea señalando a Dimitri el cual estaba hablando con Meredith pero me estaba mirando a mi.

–Meredith le hizo mucho daño Anya, se acostó con su hermano mayor, su pilar, era su ejemplo a seguir... Esa chica de hay no merece tus celos porque no tienes nada que celar de ella, ¿sabes por qué? Porque ese chico esta loco por ti, y nada ni nadie va a cambiar eso, así que ve allí y plantale un buen morreo delante de esa zorra con patas.

Me levante de la silla y fui hacia donde Dimitri, a paso decidido y contorneando mis caderas. Llegue a el, coloque una mano en su nuca y le bese, nuestras bocas luchaban por saber quién tenía el poder, pero aquí todos sabemos que es el quien lleva el mando.

Colocó sus manos en mi culo y me pego más a el, me apretó el culo y un gemido brotó de mi garganta el cual fue silenciado por nuestro beso. Y otra vez éramos el y yo, no había nadie más.

–Nunca sabrás complacerlo como yo lo hacia, cuando te des cuenta de con quien estas no te va a gustar nada.

Meredith se fue a paso rápido y una sonrisa adorno mis labios cuando nos separamos.

–No sabes lo cachondo que me acabas de poner.

–¿A que se refería Meredith? - este cambio su cara, ahora era sería.