Capitulo 2 "Absolución"

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Después de un largo año se había por fin terminado de acostumbrarme a la vida de Sasaki Haise. No era muy diferente a su vida anterior seguía creando con su kagune figuras monstruosas, deformes y mutiladas de lo que alguna vez fueran ghouls. Había visto en algunas ocasiones al segador desde lejos cuando esté se iba a alguna misión, mantenía la misma expresión cruel, distante y fría como si disfrutará de su propia crueldad siempre acompañado por Akira , una mujer distinta a todas, una mujer guapa, serena, competente y con una inteligencia prodigiosa, es una buena mujer (madre) y me ayudado mucho siempre pendiente de mi, he llegado a apreciarla. es bueno tener tiempo libre, este "trabajo" y sus subordinados no le dejaban tiempo alguno. le tranquilizaba los lamentos de espectros producidos por el viento nocturno al soplar contra la hierba. desde lo alto de aquel edificio lograba ver una humanidad que caminaba desganada, frustrada y agonizante arrastrando esas caras plagadas de absurdidad y angustia en el único objetivo de humillar y herir sustituyendo y robando hundidos cada uno en su propio pozo de maldad. 

-Haise- dijo la muerte de esos ojos inexpresivos que no dejaban traslucir la menor emoción- inclino la cabeza en forma de saludo. y así comenzaba "este" juego al que llamaba venganza.

-buenas noches Arima san -murmuro con voz inexpresiva.

la historia de estos era mas de lo que el podía soportar, era una de esas pasiones desmedidas como de novela. ese amor tan puro e inocente como un amor de niños que el había convertido en una pasión desenfrenada que solo puede tener un final la "tragedia". y de nuevo como todas las noches se reclina a su lado, mirándolo con hondos ojos; le sonríe bajo la luna inevitable. termino acostumbrándose a las caricias de la muerte, esas caricias sutiles y estremecedoras a esos besos húmedos y ardientes. y al peso de su cuerpo sobre el suyo. 

-te amo Arima san- musito mientras la muerte lo estrechaba con fuerza contra su pecho. 

-Haise....- dice con voz suave mirando a estos ojos- llama tantas a estos ojos- llama tantas veces a ese nombre porque en el fondo el lo sabe, que este cuerpo que hace suyo dejando su esencia, que estos ojos que lo miran y esta voz que pronuncia palabras de amor falsas no son de la persona que ama. y esto que lo lleva a besar sus labios y su frente no es amor es la única forma disponible de venganza, amar hasta la locura, hasta la desesperación y las lagrimas, con la esperanza que al final pueda conseguir el alivio de la muerte. 

-te amo Arima san- vuelve a pronunciar estas palabras incitando de nuevo al deseo a esa necesidad de amor. Te entrega de nuevo su cuerpo bajo esa luna cada movimiento buscando esos sonidos que escapan de sus labios que son solo tuyos porque tu los provocas y al finalizar buscas la absolución en sus brazos a este amor, a tu amor que ni tu mismo entiendes. 

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amanecer entre los brazos de Arima kisho era la consecuencia de sus "encuentros", su aroma profundamente impregnado en mi cuerpo, no importaba si busco borrarlo por medio de esta ducha, permanece en mi cuerpo recordándome lo que quisiera olvidar. los rayos iluminan su rostro mientras yo me visto

-no te vayas- dices tomando del brazo. 

-tengo que irme, mi escuadrón me han llamado, me necesitan- me obligas a mirarte a los ojos porque mi voz a activado la sospecha de que te miento  y así es, te miento ya te entregado mi cuerpo he saciado tu deseo, no me pidas que siga con esta farsa porque no puedo, yo no soy Haise. pero claro tu no puedes escuchar mis pensamientos y me arrastras debajo de ti de nuevo a esa cama, me desvistes y comienzas a acariciar este cuerpo con mucha delicadeza. ¡no, no lo hagas! la luna y la oscuridad son mis aliadas en cambio el sol y la luz revelaran mi rostro y te darás cuenta que no soy la quinque que creaste al arrancar mis recuerdos de este cuerpo. yo no soy Haise sasaki

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