—¡¿Por que mierda se escapan?! –nos grita Sofía a Antonio y a mi. Nosotros nos miramos.—Delianyz, necesitaba paz y relajarse, entonces y...
—¡Y a ti se te ocurrió ir a tirarle piedras a los carros! –grita.
—Exacto. –Antonio se encoge de hombros.
Estamos en la guagua rumbo a casa y Sofía nos viene regañando. Antonio se mantiene callado mirando por la ventanilla.
—Lely, –me llama y la miro por el espejo. –hablaré contigo en casa. –asiento.
—¿Y Nina? –pregunta Antonio.
Me dedico a ver por la ventana, casa, casas, arboles y más casas.
—En casa, se fue en Uber.
Nos quedamos en silencio, lo que resta de camino. Mis manos sudan. Llegamos a casa y veo a Victoria en el sofa hablando con un chico. No se quien es. Me acerco.
—¡Lely! –la miro y frunzo mi ceño.–El es mi mejor amigo Joel, –el chico se gira a verme. – Joel ella Es...
—Lely. –dice el y yo sonrió.
—Delianyz. Lely es mi apodo. –digo y el asiente.
—¡Ven con nosotros. –grita Victoria dando palmadas en el sofá y camino hasta donde ella y me siento en el sofá. Joel me mira. Se ve amable.
Es un chico con pelo castaño, ojos marrones claros, de casi mi misma estatura, cejas un poco gruesas y labios finos y tiene brackets.
Estamos unas cuántas hora hablando y riendo, yo casi no lo hago pero ellos si hablan mucho y el es muy extrovertido, yo no tanto, hablar con gente nueva me da nervios.
Mamá decía que era muy callada y de vez en cuando estaba bien hablar y no esconder lo que pensamos o sentimos, ya que se van acumulando los sentimientos y un día explotan.
—¿Y siempre eres así de callada? –me pregunta y yo lo miro
—Si. –digo y el sonríe.
—¡Hola Joel! –exclama Sofía bajando las escaleras.
Ella una vez entro a la casa se fue directo a arriba. No hemos hablado aún. Sofía llega hasta donde nosotros.
—Hola, señora Sofía. –dice con una sonrisa.
—¿Comes con nosotros? –pregunta y Joel asiente.
Nos vamos a el comedor y veo como Nina acomoda los platos.
—¿Te ayudo? –me pregunta Victoria y ella la mira mal. –Uy perdón.
—¡Pero ayúdame! –Victoria se levanta y se pone ayudar a Nina. Joel y yo reímos y nos sentamos.
Antonio llega y se acerca hasta donde esta sentado Joel, que es al frente mío.
—Ese es mi asiento, levántate. –dice molesto y Joel lo mira.
—¿Que? –pregunta.
—Que ese es mi Puto asiento, levántate. –Dice molesto y Joel se levanta.
—Relájate niño. –Dice Joel entono de burla.
Joel se sienta a su lado y Antonio me mira serio, hago lo mismo.
Con la mirada me dice: Que miras mocosa.
Yo le contestó: Tu belleza no es.
El ríe y niega. Sabe que guapo y bueno si está.
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Mi Maldicion. (Triologia Maldicion: 1)
RomantizmSentía que el si me iba a proteger. Pensé que más daño de el que me habían echo no me podían hacer. Pero esto apenas empieza. Vigilada, asustada y lo peor...enamorada.