Control «The gifted»

013

Jade suspiró al ver como John miraba fijamente a Clarice, intimidándola. Ella solo quería que llegara el convoy para terminar la misión de una vez por todas. Ya había pasado mucho tiempo desde que se encontraban ahí esperando el dichoso vehículo para sacar a Lorna y a Reed de ahí. 

—Perfecto. Justo a tiempo—comenta Jade bajándose de la mesa al ver los vehículos. Los tres esperaron a que se detuviera, pero no había pasado nada, a lo que el trío se miró confundido. — ¿Por qué no se detuvo?

—Algo está mal.

Jade cierra sus ojos concentrándose en conectarse con cualquier mente, lo cual era difícil porque nadie tenía la mente en blanco hasta que consiguió adentrarse a una y de sus manos salen el aura rojo, John estaba por detenerla pero Clarice niega, tomándolo del brazo. La rubia abre los ojos y el autobús empieza a detenerse, segundos después la llanta estalla.

—Tenemos que apresurarnos. Puse a dormir al conductor—habla Jade empezando a correr por la fabrica en la que estaban con John y Clarice siguiéndola.

— ¿Por qué no se detuvo en el lugar indicado?

—No lo sé, pero ahora debemos encontrarlo—responde John a Clarice, Jade se detiene al ver que no había salida, por lo que se aparta de una pared a lo que John corre hacia esta y la destruye con su cuerpo.

Clarice abre los ojos sorprendida. —Diablos.

—Increíble, ¿cierto? —musita Jade con una leve sonrisa al ver a su novio, ambas empiezan a seguirlo esta vez. 

Llegan a una plataforma en el que John sube con facilidad y se gira par ayudar a Jade a subir y se miran con una sonrisa, ambos se giran para extender sus manos para subir a Clarice, quien al subirse queda muy pegada a Jade. Ambas se miran unos segundos, pero se separan al escuchar el carraspeo de John.

—Muy bien—susurra Clarice colocando sus manos al frente.

— ¿Puedes llevarnos al autobús ahora?

La peli morada asiente y de sus manos emana una aura morada, sin embargo algo sucede con ella preocupando a la pareja. — ¿Estás bien? —cuestionan al mismo tiempo, haciendo que ella los mirara un poco confundida por lo que había sentido.

—Sí, solo que se sintió raro—contesta, intentando otra vez crear el portal, pero de sus manos no surgió nada.

— ¿Qué pasa?

—No lo sé, es como si algo interfiriera con el portal.

John y Jade se miran por unos instantes preocupados. —Déjenme ver que pasa—musita John cerrando sus ojos, pero algo le impedía usar su poder. —No puedo rastrear.

—Demonios—murmura Jade bajando de la plataforma, teniendo una leve sospecha de que estaba pasando.

— ¿Qué está pasando?—pregunta Clarice al ver a la rubia así, John por su parte no sabía como sentirse al respecto porque también sospechaba de quien era el responsable, pero sabía que para su novia era más difícil. Entonces baja de la plataforma para seguir a Jade con Clarice siguiéndole.

—Es imposible.

— ¿Qué es imposible?

Ambos encontraron a Jade mirando por una ventana, su ceño estaba levemente fruncido y su mirada reflejaba tristeza y melancolía, sus ojos estaban levemente humedecidos y su boca estaba medio abierta; como si quisiera decir algo, pero no emitía ningún sonido.