The Game of the Nightmares (Little Nightmares)

Cap.13.

Mono camina entre las calles; agotado.

Resolver los rompecabezas sin Six fue difícil, incluso cuando obtuvo ayuda... al menos incinero al doctor, se lo merece, después de lo que le hizo a Nosebleed sintió satisfacción al verlo arder.

Sale de otro edificio, ya van dos que inspecciona, en ninguno esta Six. Está preocupado, escucho cañones, lo que quiere decir que tributos murieron, tiene miedo de que uno de esos cañones haya sido Six. Tan pronto como salió del hospital corrió a la torre, esa edificación que se alza imponente ante la ciudad.

¿Debería buscarla allí? No encontró ningún acceso a la torre y la única puerta está cerrada. Quiere descansar, el hospital fue aterrador y agotador, pero debe buscar a su amiga.

Escucha una campanita, alza la mirada. Frente a él cae un pequeño paracaídas con una cajita de metal, se acerca, al no haber alguien más allí la abre, dentro hay dos frasquitos y una aguja ¿Por qué le enviarían esto? No se siente enfermo.

Se toca la frente; no tiene temperatura.

"Y si no es para ti" Piensa, toma la caja y hecha a correr al siguiente edificio.

"Debe ser para Six, ella debe estar tan enferma que no puede ponerse esta vacuna por sí misma"

Corre, empieza a buscar dentro del edificio. Nada.

Entonces un sonido llama su atención, es una melodía, se escucha rara, pero es música. Camina cautelosamente, se dirige al sonido, proviene de un cuarto en particular: Hay juguetes, una maleta con cosas regadas a su alrededor, dibujos y un armario; pero lo que capta su atención es la persona que esta allí, una chica encorvada sobre si misma que gira la manivela de la caja de música, de la que proviene la melodía que escuchó, reconoce el impermeable amarillo.

-Six. - se siente feliz de encontrarla.

La chica se retuerce en su lugar, como si el sonido de su voz la lastimara.

-Six ¿Estas bien?

Ella retrocede, se lleva la caja de música a una esquina de la habitación, Mono se acerca asustado, no sabe qué le pasa.

Ella parece notarlo y le gruñe, entonces nota que su impermeable tiene sangre seca, que su boca está cubierta por el líquido rojo también. Se inclina ante la chica, ella le gruñe más alto.

-Hey. - susurra, eso parece no molestarla como lo hizo su voz normal. - Soy Mono.

Intenta tocarla, pero esta se avienta contra él, Mono piensa que lo va a matar, pero solo lo empujo, salió por la puerta.

Decide perseguirla, la encuentra en otro cuarto, se da cuenta de que no ha dejado esa caja de música. También se da cuenta de que él mismo lleva aun el sombrero amarillo, se lo quita y se pone su bolsa de papel. Se acerca a ella, hablándole en voz baja, Six parece reconocerlo entonces, lo deja acercarse sin gruñirle como antes; bueno, ha llegado a algo, no está enferma o al menos eso no parece, lo que sea que tenga debería quitársele con la vacuna.

Six hace un gruñido hacia él, pero no suena amenazador, de hecho, suena gentil.

Dirige su mirada hacia sus manos, la manera en que se mueve incluso es extraña, como la de un animal, le está mostrando su caja de música.

-Es muy bonita. - sigue susurrando. Ella hace un sonido, parece una afirmación; vuelve a acercarse la caja de música y gira la manivela.

Mono suspira, no sabe cómo acercarse para inyectarla, no sin que esta actúe tan agresivamente, está seguro que para esto es la vacuna ¿Debería esperar a que se durmiera? Se queda sentado frente a ella.

Six tiene su capucha puesta, su cabello pegajoso por la sangre le cubre los ojos; el impermeable esta sucio, cubierto de algo negro y sangre; sus pies descalzos vuelven a tener heridas abiertas, Mono piensa que debe conseguirle unos zapatos; la forma en que está sentada no es normal, es como si sus piernas no tuviesen huesos y como todo su peso esta sobre sus piernas estas se tuercen, parece doloroso o cuando menos incomodo pero ella no lo nota; sus manos se mantiene firmes sobre la caja de música, sus dedos son lo que se ven raros, hacen movimientos extraños, pero ninguno se ve roto; los suspiros que dan suenan ásperos y entrecortados, como si se le dificultara respirar.

Mono la observa, le preocupa que esa sangre sea suya. Pronto empieza a sentirse cansado, todo lo que le paso en el hospital le está pasando factura y la melodía de la caja no ayuda, le pesan los ojos.

Siente un calor próximo a su cuerpo, abre los ojos asustado, es Six, intenta respirar con normalidad, la forma en que ella actúa es como un animal, si muestra miedo nada le dice que ella no vaya a lanzársele encima. Piensa que esto es más raro cuando ella lo huele, no lo huele, lo está olfateando, cierra con fuerza sus ojos cuando lo hace muy cerca de du cuello, cerca de la yugular.

- ¡Ay! - exclama cuando la chica lo tira hacia abajo, se cubre la boca con miedo de que ese sonido molestara a Six.

Ella lo está abrazando, o algo así, esta cernida en el como si fuese una almohada, puede jurar que está ronroneando o gruñendo muy ligeramente, incluso esta...

Mono intenta huir, intenta separarse de ella, pero Six lo agarra con más fuerza y se queda totalmente tieso cuando hace un sonido gutural, una amenaza. Ella se está frotando contra él, se siente asustado. Se da cuenta de algo, ella está lo suficientemente cerca para que pueda clavarle la aguja, él no tuvo que acercarse a ella, esta es una buena oportunidad; de su bolsillo interno saca la pequeña caja de metal, con movimientos lentos saca la aguja y uno de los frascos.

Se detiene, se da cuenta de que Six parece estarlo inspeccionando, no como una persona, claro, lo huele y lo tantea como si intentase descubrir algo, las manos de la chica pasan al frente tocando su pecho; logra poner el líquido en la aguja, la presiona un poco para sacar el poco aire que esta pueda tener, Six sigue inspeccionándolo, se pone frente a él.

Mono se le lanza encima, le clava la aguja en la pierna que es la única piel expuesta que logra alcanzar e inyecta el líquido, Six se lo quita de encima, gruñendo y jadeando, se levanta, va a atacarlo, pero no lo logra, cae al suelo.

Mono se recupera del susto, se acerca a su amiga y le toma el pulso, está bien, está viva, suspira aliviado; comienza a rezar internamente para que cuando despierte ella vuelva a la normalidad y que solo sea necesaria una dosis, aún tiene el otro frasco, pero no venía con instrucciones, así que no sabe si solo debe ser una o dos dosis.

Va hacia el cuarto donde había encontrado a Six, toma toda la ropa que encuentra y una manta, lo lleva todo al otro cuarto, allí acomoda todo dentro de la maleta y carga a la chica hasta ella, la pone sobre la maleta como una especie de cama, cubriéndola con la manta. Él va al único sofá que hay en ese cuarto para dormir, ni siquiera se va a asomar para ver el tributo de los tributos caídos. Se siente cansado.