Prologo.

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Te lo advertí muchas veces, ¿realmente creíste que harías la diferencia? Que tonta.

Sollozo silenciosamente.

Pobre Akiara, debiste hacerme caso, estúpida.

Calla de una puta vez, dejame en paz. — Le respondo a la imbecil de mi mente, mi peor enemiga, a la vez que me tomo por los cabellos y deslizo mis manos por mi cara en un vano intento de secar el desastre de lagrimas que tengo en mis mejillas.

No entiendo nada de lo que esta pasando, Connor siempre me demostro amarme, me demostro ser diferente, me hizo entender que no iba a fallarme, y ahora ¿por qué me hace esto?

Muchas veces te dije que no harías la diferencia.

Maldita voz en mi mente, nunca sabe cuando callarse.

Y tú nunca dejas de ser una estúpida, ¿cuando entenderas que el amor no existe? ¿cuando entenderas que ningun chico nunca podra verte con ojos de amor?, tu debilidad realmente es detestable.

No tan detestable como tú, perra.

Recuerdo las miradas de Connor, las sonrisas que me dedicaba, sus abrazos y sus besos, Connor... ¿Quien eres realmente?

Sin fijarme me he quedado estatica en la acera, y sin mirar a los lados cruzo la avenida, para asi darme cuenta que cometí un grave error, debi mirar a los lados, lo ultimo que siento es el impacto del auto contra mi torpe cuerpo, y como pierdo el conocimiento poco a poco, no sin antes pensar en él, mi gran amor y sin duda alguna mi perdición, en mi familia y en Grace, lo siento mucho, les fallé.

adiós.

Olvidar, soñar, recordar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora