Llegué a mi casa hecha un desastre. En todo sentido. Estaba deprimida, sola -Como siempre- y asquerosamente asqueosa. Cuando salí del restaurante empezó a llover. Sí, se comfirma, la mala suerte vive conmigo. Me suspendieron del trabajo, Jack se enojó conmigo, soy fea, soy un desastre, soy invisible. Y antes de seguir con esto, voy a contarles mi "Historia"
Ya saben lo básico, mi edad y mi nombre. Saben que mis padres murieron en un accidente. No tengo familia, mis abuelos viven al otro lado del mundo. Nunca soportaron a mis padres, y mis papás eran hijos únicos, por lo tanto, tíos no tengo. Desde los 12 años, que estoy sola, tuve una sola experiencia de amor, y la cual me marcó hasta es día de hoy, fue lo peor que me pudo pasar a esa edad, y luego el fallecimiento de mis padres. Cuando empecé secundaria pasé a ser la invisible. Nunca tuve amigas y menos amigos. Nunca tuve la autoestima alta, siempre estuvo por el suelo. Siempre fui la persona que mas se odió, nunca alguien va a poder odiarme mas de lo que me odio yo. Siempre me senté al fondo del aula, mis profesores... Fueron un asco conmigo, nunca supieron mi nombre y eso hizo que cayera en depresión. Ese mismo año comenzaron las amenazas por cartas que aparecían en mi banco. Algunas de ellas decía "Cuidate la espalda, porque voy a golpearte" las tengo guardadas en una caja y cuando las leo mi odio por la sociedad crece mas y más. Con los único que me llevo bien es con Laura y con Jack, pero nunca pasamos a una "Amistad" ¿Para qué te sirve eso? Cuando conté mis problemas, supe que el 80% de las personas no les importó y el otro 20% los gritó a los cuatro vientos, así que a la hora de contar un "Secreto" tienes que fijarte a quien se lo dices, porque cualquiera puede apuñalarte, por la espalda o de frente. No importa si lo sabes, si van a apuñalarte van a hacerlo, sin miedo, sin piedad.
Tiré mi mochila en el sillón y encendí las luces del departamento. Todo seguía como lo había dejado. No había nada raro. Dejé las llaves en la mesa y me fui a mi cuarto. Donde siempre estoy. Saqué mi cuaderno y mi pluma. Y comencé a escribir.
*5 de Agosto de 2014, 15:06
Creo que no voy a confiar en ninguna persona nunca mas. Por defender a la idiota de Alison me suspendieron. Cada vez que una persona insulte a otra, solo voy a mirar, a darme vuelta y seguir en mi camino. No me sirve nada defender a nadie. Porque nadie me defendió cuando fui atacada.*
Saqué mi navaja e hice una línea diagonal en mi brazo, solo ardió un poco, era costumbre. Dejé caer varias gotas en la hoja que había escrito y cerré mi cuaderno.
Estaba desecha, siento que nunca serví, nunca serví como persona, nunca serví como hija, nunca serví como... mujer. En fin nunca serví.
Me tiré en mi cama y saqué mi libro. Era temprano y mi estómago crujía. Sabía que después de comer tendría que estar veinte minutos frente al inodoro -Water. retrete. O como le digan- devolviendo todas las calorías, pero no podría aguantar mucho. Me levanté, fui hasta la heladera, saqué algo de carne y la puse al horno. Siempre dije "Mientras mas grande la comida, va a ser mejor sacarla" Así que eso haría. En unos 20 minutos ya estaba y en 5 la terminé. Tomé agua, mucha mucha agua y esperé 10 minutos. Después de que pasaran los minutos,corrí al baño y me paré frente al inodoro, metí 2 dedos en mi boca y comencé a moverlos, sentía que toda la comida subía y terminé vomitando todo. Creo que... voy a terminar hecha un palo y desnutrida pero... ¿Qué mejor que morir flaca? Es preferible eso a que morir como una ballena obesa.
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