Capítulo 7

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Era la quinta vez que Jessica revisaba su celular en menos de 10 minutos, hacia más de una semana que no sabía nada de Jennifer desde que la joven le dijo que no podía afrontar una relación con una mujer sabiendo que la mirada del resto la haría sentir muy insegura. [...]

Ir a la Universidad y recorrer lugares distintos a los que hacía a menudo para evitar a Jess, se estaba volviendo algo de todos los días para Jenny, quien prefería tomar su almuerzo en un cubículo del baño y saltearse las horas de psicología para no cruzarse con la joven a la cual según notó en su mirada la última vez que la vio, le había roto el corazón. [...]

Las horas pasaban convirtiéndose en días y así en semanas, 3 para ser más exactos, 3 semanas de no saber nada una de la otra, de acrecentar su orgullo para no mendigar amor.

[...] 

3:41 am un grito ahogado inundo la oscura habitación, de pronto se prendió una lámpara de mesa. Jennifer estaba ahí tratando de reincorporarse, con el rostro empapado. Las manos le temblaban y le faltaba el aire. Miró a su alrededor y vio su habitación pequeña, casi vacía desde la partida de Cameron... Otra pesadilla que la encontraba en la penumbra de su cuarto, que la sacaba de su tranquilidad y le decía indirectamente que separarse de Jessica no fue la mejor decisión. Su inconsciente estaba tratando de darle a entender que esta vez el corazón era el que tenía la razón.

Los días pasaban y para Jessica todo daba igual. Cada mañana al levantarse tenía el rostro de Jennifer diciéndole "te amo" y al minuto recordaba como destrozo su corazón diciéndole en otras palabras que no iba a jugársela por ella. Entro al baño y al mirar su rostro apagado en el espejo decidió cambiar un poco con eso, no le gustaba que sus días fueran tan monótonos, tan grises, no le estaba haciendo bien. Se corrió el cabella para atrás con la mano y se dio cuenta que hacía semanas que no se rapaba el costado, algo que antes era una rutina diaria. Tome la afeitadora y comenzó su ritual. Se miró de lado y estaba todo perfecto, se sacudió la camiseta, lo que le provocó comezón en el cuello el cual estaba lleno de cabello. Abrió la ducha y de pronto sintió el timbre, miro la hora en su muñeca y eran las 16:45, se dio cuenta que su día había transcurrido dentro de su departamento. Cerró la ducha y dudando completamente que sería Jennifer abrió la puerta, quien estaba ahí para su sorpresa era su ex novia Alexa, quien ingresó con un bolso de mudanza el cual dejó a un lado y acercándose a Jessica la beso intensamente sin darle derecho a reaccionar. [...]

Miradas SospechosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora