Una chica de alta sociedad gozaba de molestar la paciencia de una Castaña campesina con mal humor siempre.
De aquella curiosidad había salido un bonito amorío, que se fue visto desmantelado por una bruja envidiosa.
-Jenlisa y más shipps
-Humor, Fluf...
Jennie esa linda campesina que vivía su vida sin preocupaciones y con el mando de su mamá. Sufría mucho nerviosismo por entregar la carga a la princesa Manoban, la heredera del trono que se la pasaba mandándole besos coquetos a las afueras del castillo.
Su vestido simple y su cabello recogido en una cola, las afueras del castillo tenía muchas flores y racimos de vallas con colores exóticos.
—¡Hola campesina!—Chillo lisa acercándose a ella con mucha emoción.
—Buenos días su majestad, traje las dos docenas del pan dulce que pidió. Agregado don por parte de mi madre Dahyun.
—Genial, entra —Jennie no protesto pues ya la princesa le llevaba a rastas hacia la cocina del palacio, mostrando grandes cosas de cocina de la mejor calidad.
Jennie observaba fascinaba cada rincón de la cocina real, tenía varias cocineras y cocineros expertos. Las cajas de pan las dejo en el recibidor, otra vez siendo jalada por lisa ahora al jardín real.
La decoración era rústica y muy cómoda, las plantas muy bien regadas. En medio del patio existia un columpio dónde ya se encontraba lisa con un libro y su enorme sonrisa, confundiendo a Jennie ¿Que planea la princesa lisa?.
—Ven, quiero que me leas mamá ya mando diez lingotes de oro a tu madre—Jennie atónita hizo caso sentandose a su lado. El libro tenía tapa roja, con letras del nombre; "El principe feliz".
—¿Lisa que planeas?.
La bella princesa sonrió, acercándose al lado de jennie dejando que si espacio personal se cierre. Jennie no era capaz de pronunciar palabra lisa aprovecho aquello para tomar un mechón de su cabello y dejarlo detrás de su oreja apenas acariciando la mejilla de jennie.
—Mi bella campesina, planeo que seas mía. Planeo conquistar cada rincón de tu desolado corazón. Planeo ser aquella estrella que esperas cada noche, cuando el cielo se vuelve oscuro. Planeo tomar en posesión tus lindas caderas. Planeo que cada centímetro de tu cuerpo sea explorado por mis suaves manos. Planeo hacerte feliz cada mañana con tan solo mi presencia.
La princesa lisa dejo un beso en su cuello, haciendo que la anatomía de jennie se sintiera desfallecer.
Los astros eran testigos de las osadas palabras que Laia soltó, haciendo que dejara a una pobre chica con su corazón a mil por hora.
Lisa se llevó el libro.
—Mi campesina, mañana vendrás a la misma hora en el mismo lugar. Mis clases de lectura con importantes—
Con pasos apresurados Jennie salió del palacio, su corazón seguía desbocado su madre se preguntaba que sucedía con su hija. Verla correr tan rápido le hacía sospechar.
Lisa sonreía bobamente, siendo observada por Sofía la consejera real.
—Lisa, parecía asustada.
—Sofia, ella no lo sabe pero será mi esposa—rio tiernamente, caminando adentro del palacio. Lista para el banquete con algunos monarcas, jungkook y su padre.
Esa cena era de negocios muy importantes y como todo amante de los vestidos no perjurio en tomar su más glorioso vestido rosa, su cabello recogido en rizos y flores.
La banda del palacio tocaba una suave melodía, los invitados quedaron cegados por la belleza de la futura monarca.
Pero más admirados por la reina, el rey advertía a todos que no observarán a su preciosa esposa.
Para nadie era novedad el gran amor que se tenían el rey y reina. Contaban mucho su historia de amor, la reina Chaeyoung solía ser una princesa muy juguetona y amante de las flores.
El principe dejaba en las puertas de su palacio unas bellas flores recogidas por el de su jardín. Entre esos pétalos olorosos, dejaba cartas a la princesa.
Tiempo después se casaron, amándose desde el primer segundo en que se vieron. Veinte años pasaron para poder verse de verdad. Haciendo que fuera posible aquel amor de lejoa que varios se mofaban.
Fruto de ese amor puro, la niña mas linda y apreciada por el reino. Lisa
Jungkook miraba incómodo a su mejor amiga, esa cena seguía siendo extraña pues el enfoque eran ellos dos. Los invitados los observaban esperando interacciones entre los dos.
—Mi rey y reina, me complace anunciar que los jóvenes príncipes en unos meses cumplirán su mayoría de edad para el casamiento. Mi hijo Jungkook promete ser un esposo fiel y muy valeroso para la preciada princesa.
—Mi lord Magnus, me gustaría que hablemos de esto en otro momento. Lisa aun no tiene la edad para pensar en casarse, debe regirse a las costumbres del reino aún no consigue dama de compañía.
El lord asíntio antes las inteligentes palabras de Chaeyoung, su palabra era ley como dictaba su rey.
Todos estaban gustosos de seguirla por lo pura de corazón que llegaba a ser.
La cena siguió con muchas risas y acuerdos pendientes, en la cabeza de nuestra coqueta monarca colo rondaban los bonitos labios y color de piel de la inocente campesina.
Lisa miraba su balcón, mientras peinaba su cabello naranja. Su vestido semitransparente de seda, y sus rizos bailaban al ritmo del viento.
No muy lejos un forastero caminaba por allí, entrando sin querer al jardín real y encontrando a la más bella doncella que en Italia podría haber.
Quedando flechado por su majestad la princesa lisa, sin saber que ella solo quería esos sentimientos de la campesina.
🕴️Que hermoso escribir con Rocío Durcal de fondo. Jdjdjdjd ¿Les gustó? A mí sí, se que voy despacio pero gozenla así.
Por otro lado diré que ¿Cómo están?, ¿Que tal su semana? ¿Si se están alimentando?, Si no es así y tienen dificultad tomenlo con calma no se esfuercen tanto se lo doloroso que puede ser tener problemas alimenticios.
¿Se sienten felices?, Yo un poco.
¿Los hicieron sentir mal? Vengan les doy un abrazo, nadie merece ser desvalorizado.
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Miren son ustedes, así de brillantes son para mí. Demasiado importantes para una niña insegura. Los quiero mucho chau besitos de gomita🍡.
