Capítulo 30| Sueños

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- La luna está hermosa esta noche. - dijo una voz que venía por encima de nuestras cabezas, al mirar de donde provenía nos encontramos con Kenma asomado en el balcón del segundo piso observándolo todo- ¿Es lo que le querrías decir cierto? ¿Adiviné?

- Para que mentir, lo ibas a saber igual- dijo suga mientras bajaba la cabeza sonrojado.

En ese momento mi cara era la de un tomate. Los nervios se apoderaron de mí, tenía que decirle tarde o temprano pero aún sabiendo que me corresponde no se si le podré decirle...

- Si le haces daño, será la primera cosa de la cual te vas a arrepentir cuando sepas que te quedan 3 segundos de vida- dijo Kenma para luego dejarnos a solas.

- Emmmmmm Y-Yo..... Suga........ Verás........- dije muy nerviosa.

- Se que no me correspondes, no te diré nada ni te obligaré a nada. Yo ya te he dicho, ahora tu haz lo que quieras. Si quieres acceptar mis sentimientos, aceptalos, sino, me gustaría que almenos fuéramos amigos.- dijo Sugawara antes de marcharse fuera de casa corriendo.

No lo detuve....

No pude...

El se fue. Yo me quedé despierta, esperándolo hasta que llegara. Me quedaré aquí esperando que regrese para contárselo todo.

Eran pasadas las tres de la mañana y no regresaba, lo he llamado ya un montón de veces pero salta el contestador. Tampoco le llegan los mensajes. Debe tener el mobil o apagado o sin bateria... Estoy preocupada por el.

El sueño puede conmigo, a este paso me voy a dormir.

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Sugawara pov.

Llegue a casa a las 4 de la madrugada, me fui a la montaña a perderme en mis pensamientos y a reflexionar sobre todo causando que las horas se me pasasen volando.

Al abrir la puerta de casa, me encuentro a T/N, sentada en el suelo,  apoyando la espalda en la pared, completamente dormida.

No la podía dejar así. La cargué y la llevé a su cuarto. Subiendo las escaleras empezó a murmurar cosas que no lograba entender, se ve que estaba en un sueño en bucle ya que estaba repitiendo lo mismo todo el rato. En una de esas la logré escuchar bien.

- ¡Espera! A mí también me gustas Suga- decía entre sueños y murmuros.

Al escuchar eso me quedé de piedra, pensaba que era el único que tenía sentimientos por el otro, pero se ve que no.

La vida aveces te sorprende cuando menos te lo esperas.

Si eso es verdad....... seria muy feliz y haría lo posible para que ella también lo sea.

Abrí la puerta de su habitación, la recoste sobre la cama, la tapé con las sábanas y me fui cerrando la puerta a mi paso con el más absoluto sigilo.

Mañana le preguntaré...

La Jugadora Del Nekoma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora