HARRY Y LOU TERCERMUNDISTAS

Parte 18

Louis termino de comer, iba todo llenito y todo bonito. 

Caminaba por una banqueta para irse al hotel, pero en su paso visualizo a mucha gente aplaudiendo y gritando. Al parecer alguien bailaba en medio. 

¿Enserio, eso lo hacen aquí cada rato?, ponen a la gente a bailar y ya?

El chico que bailaba en medio era muy alto y era muy torpe y tímido. En cambio el chico que cantaba se miraba más libre y suelto. Era gracioso verlos. 

Decidió acercarse para ver aquel espectáculo, hasta que un auto comenzó a sonar su claxon a lado de él, era Erick. 

— ¡Sube, sube ahora! 

— ¿Qué pasa? — dijo mientras subía. 

— Ahorita te explico, solo guarda silencio. 

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Niall iba parloteando y señalando todo. Harry iba muy molesto con dos bolsas de comida a los lados. Se les olvido donde habían estacionado el auto y ya llegaban rato buscándolo. 

— Harry, suena la alarma del auto.

— ¿Y crees que no lo he hecho desde hace rato?

— Uta, pues no es mi culpa ¿sabes?, hay que darlo por robado. 

Harry se puso frente a Niall y empezó a caminar al revés mientras se quejaba. 

— Bueno, entonces porque tengo un acompañante si también se le va a olvidar donde deje el auto?

— Harry — susurro. 

— Y solo viene conmigo para comer todo lo que pueda y ni siquiera hemos encontrado a Louis.

— Harry

— ¿QUE? — justo cuando dijo eso se estrello con una multitud de gente. 

Niall se empezó a reír pero dejo de hacerlo cuando miro que ninguna persona se reía. 

— Enserio, y-yo lo siento, no quise — Harry tenia miedo, sentía que lo golpearían. 

— ¿De donde vienen? — pregunto un hombre. 

— De... — Harry no quería decirlo. 

— ¡De Londres! — dijo Niall. 

Gracias idiota, ahora nos secuestraran, pedirán dinero y se darán cuenta que soy el hombre más millonario de la tierra, cuando tengan lo que quieran me van a matar y tirar como un costal de papas. 

— Vienen de muy, muy lejos... — dijo otro hombre. 

— Si y ya nos tenemos que ir, compromiso — tomo la mano de Niall e intento irse pero aquellos hombres no los dejaron. 

— Tranquilo gringo, no te haremos daño — puso su mano en el hombro de Harry — estábamos en una pelea de baile...

— Oh, lo siento...

— Y ahora ustedes deben continuar — y lo empujo al centro de la gente. 

— No, nonononononononono — hablo muy rápido y se puso muy nervioso — yo no bailo, no sé. Dios que vergüenza. 

— Si bailas y tu güerito — le quito las bolsas de comida y se las dio a Niall — Tú cantas. 

— ¡Genial! 

— ¡NIALL! 

—Solo baila Harry, baila por Louis. 

— Te odio.