۝╬Black Jade╬۝

Secreto

El golpeteo de los pies contra el suelo de madera sonó cada que el metrónomo marcaba el tempo, viajó en el salón por encima de una melodía suave de piano, sumado a ello, Shen Yuan golpeaba su abanico en la palma de su mano al inicio de cada compás tarareando mentalmente la línea melódica de la canción. Tenía los ojos cerrados, pendiente de cualquier error que llegaran a tener los menores.

Shen Yuan creía firmemente que ninguno de sus alumnos lograría destacar si no dominaban primeramente las raíces de la música. El ritmo.

Una cosa era identificarlo y otra muy diferente poder seguirlo, de ello dependía coordinarse al momento de bailar, después de todo el ritmo era la estructura base de cualquier canción. Otra forma más romántica de llamarlo era referirse a él como el esqueleto de cualquier pieza musical. Una vez que pudieran domar eso, los dejaría andar por el salón libremente moviéndose con cualquier canción que quisieran, por ahora debían conformarse y dejarse torturar por Brahms.

Si era sincero, ni siquiera le gustaba tanto la música clásica, prefería mil veces el pop con toques de balada, canciones perfectas para la danza contemporánea, siendo esta donde destacó en sus días de bailarín, sin embargo, sabía de primera mano que no había rival para el ballet en cuanto a gracia y delicadeza de movimientos.

Al inicio parecía que los chicos se rendirían tarde o temprano, no importaba si eran alumnos becados o si sus padres habían pagado los caros cursos que ofrecía Cang Qiong, todos, absolutamente cada uno de ellos eran como bebés aprendiendo a caminar, incluso los que tenían mayor condición física terminaban lloriqueando al final de la clase. De alguna manera, en el transcurso de las semanas habían logrado mejorar significativamente, se mostraban más interesados por el baile y ponían más empeño en perfeccionar sus movimientos, Shen Yuan se conmovió pensando que finalmente habían reconocido la belleza del baile y no sólo iban a clase para calentar la barra.

Poco sabía el maestro que todos los aprendices habían notado el trato preferencial que estaba dándole a Luo Binghe, y deseosos de poder quitarle su lugar y recibir elogios por parte de Shen Yuan se tomaron en serio los ensayos.

Aún así, estaban muy lejos de poder alcanzar a Luo Binghe, quién además de sus prácticas, pasaba horas con Shen Yuan, solamente ellos dos en un salón vacío. El menor tenía toda la atención de su maestro durante sus ensayos extracurriculares, y él la recibía con gusto, dejando que los delgados dedos de Shen Yuan le dirigieran hacia la posiciones correctas. No le importaba cuanto pudiera doler o si no tenía tiempo para otras cosas que harían los chicos de su edad, Luo Binghe estaba bien y se sentía satisfecho al ver la expresión de orgullo y satisfacción de Shen Yuan mientras lo felicitaba. También había momentos donde recibía uno que otro regaño, y aunque lograban asustarlo al inicio, para ese entonces incluso ver a su maestro molesto le causaba un cosquilleo en la nuca y que terminara mordiéndose los labios ansioso.

Entre los otros profesores de la academia ya viajaba el rumor del huérfano de los barrios bajos que destacaba sobre sus compañeros siendo instruido por Shen Yuan, y este no podría estar más feliz, sus esfuerzos comenzaban a dar resultados, iban a paso lento pero seguro, ¡Si todo salía bien tendría a una estrella en ascenso como su alumno muy pronto!.

–La clase terminó, todos lo han hecho excelente está última semana– Shen Yuan los felicitó ocultando su sonrisa tras el abanico en su mano– Como saben, próximamente tendremos la demostración de baile junto a otras academias, así que espero que todos tengan en mente una canción, no importa el género, sólo recuerden que cada uno hará la coreografía, yo estaré asesorándolos pero no podré hacer nada más.

Rápidamente el salón se llenó de voces emocionadas, todos los estudiantes sabían que esa era su oportunidad para destacar, si tenían el talento necesario alguna agencia de baile podría contratarlos o bien, podrían comenzar a formar una buena reputación, otra posibilidad era que el director de la academia Cang Qiong, el reconocido Yue Qingyuan, los recomendara entre su amplia lista de contactos. Algo parecido sucedió con Shen Yuan, para cuando entró en Cang Qiong como aprendiz no había nada más que pudiera aprender, llevaba prácticamente toda su vida bailando con profesores privados reconocidos y de talla mundial, a pesar de que nunca aceptó un contrato para afiliarse a una agencia de baile recibía demasiadas ofertas para participar en producciones musicales o programas, Yue Qingyuan se había convertido prácticamente en su manager.