¿Tan jodido es el universo como para crear seres nuevos?, luego de un experimento a nivel militar el caos se desató por mi ciudad y el mundo.
Vivir en un apocalipsis donde los muertos no se quedan muertos y los zombies no son sólo zombies, armas que...
Era de noche cuando todo inició, el pánico invadió a las personas y el caos no tardó en llegar. Lo único que se sabía es que hubo un ataque terrorista y manifestaciones violentas, pero en cuestión de horas llegaron a mi ciudad; esas personas "agresivas" atacaban a los civiles, por lo que el Gobierno dio órdenes de no salir de nuestras casas, cosa que resultó imposible cuando irrumpieron en nuestra casa.
—¡Tenemos que irnos ya!— dije mientras entraba a la habitación de mi madre y cerraba la puerta, no paso mucho para que esas personas de golpearan contra ella y empezaran a rasguñar la puerta —Empaca un conjunto de ropa para ti, yo bloquearé la puerta.
Ella aún en estado de shock comienza a guardar la ropa en una mochila que tenía ahí, cuidando igual de no caerse pues esta embarazada.
—Esperemos a que se vayan y luego bajamos por comida y agua hijo, así será más fácil salir— dijo mi madre cuando empezaban a cesar los rasguños, asentí con la cabeza mientras colocaba el escritorio en la puerta sin hacer mucho ruido. Cautelosamente me acerqué a la ventana para observar la situación a fuera y me arrepentí al instante, a lo lejos se escuchaban gritos de auxilio o terror, las personas corrían o pasaban en auto velozmente mientras eran perseguidos por aquellos manifestantes, cuerpos en las calles totalmente destrozados; esas personas corrían realmente rápido pues estaban a la par con el coche que trataba de huir hasta que uno de ellos dio un salto enorme logrando subir al techo del automóvil. Asustado cerré las cortinas para no ser vistos y apague la luz.
No se cuanto tiempo paso...no se escuchaba nada en la casa y el sol anunciaba que eran aproximadamente las 8 am, desperté a mi madre para que bajáramos. Abrí la puerta lentamente y revise ambos lados-No había nada- caminamos con cautela hasta llegar a mi habitación para tomar una mochila, algo de ropa y mi celular, continuamos bajando hasta llegar a la cocina y tomamos todo lo que pudimos pero todo había sido demasiado fácil; una de esas "personas" había aparecido y se había lanzado contra mi para intentar morderme.
—¡Corre, sal de la casa!— grité mientras sostenía la cabeza del señor, estaba totalmente ensangrentado, pálido, su piel había empezado a tornarse azul y sus dientes se veían afilados; trate de mover la mano hasta el cesto de basura ¡Lo tengo! Pensé apenas lo sentí entre mis dedos y en un movimiento rápido de lo puse al señor y salí corriendo de ahí.
Mi madre estaba a fuera y cuando me vio corrió a abrazarme, por instinto mire hacía atrás pero el señor sólo nos veía desde la puerta, como tratando de evitar que algo le diera.
—Vamos, tenemos que averiguar que esta ocurriendo— dijo mi madre mientras me tomaba del brazo para empezar a caminar, todo estaba inusualmente tranquilo y eso solo me tenia más nervioso.
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Llevábamos caminando dos horas, había intentado llamar a mi padre pero al parecer mi celular no tenia señal, el día de ayer mencionó que se quedaría hasta tarde "trabajando", como si realmente le creyera, no podía decirle nada a mi madre de lo que descubrí hace unos meses debido a su estado.
