Mrs. Hemmings♥ Un nuevo comienzo

Capitulo 31

Luke subió las escaleras con Isabela en brazos. Se había quedado dormida. Me senté en el sofá de la sala. Tenía miedo, sí eso era lo que sentía en este mismo momento. 

Donde estaba mi final feliz? A caso no lo merecía? A caso no merecía un poco de tranquilidad en mi vida? Las respuestas eran claras, la vida era injusta conmigo.

Sentí sus manos en mis hombros y me estremecí del susto. Voltee mi cuello para verlo a los ojos, Luke tenia una mirada triste.

-Todo va a estar bien-dijo sentándose a mi lado.
-No suenas muy seguro-dije cruzando mis piernas en el sofá.
-________, pase lo que pase, quiero que sepas que te amo.
-Te estas despidiendo de mi? Luke piensas que yo podría seguir viviendo si te pasa algo?
-No me estoy despidiendo pero siempre es bueno decirle a la persona que amas todos los días que sepa que eres importante para vos-dijo tomando mis manos.
-No nos merecemos esto, no lo merecemos Luke-dije rompiendo en llanto.

Luke se acerco a mi y me pego a su cuerpo en un abrazo. Las lagrimas caían en su camisa pero no importaba eso en este momento, no importaba nada.

-La vida te pone pruebas, que tienes que aprender a afrontar
-Prométeme que si me pasa algo, seguirás sin mi, seguirás viviendo.-dije con un hilo de voz.
-No puedes pedirme eso-dijo frunciendo el ceño-Es como decirle al fuego que no queme _________ eso es imposible. Si a vos te pasa algo yo me muero contigo.
-Y Isabela? Ella te necesitara
-Porque empezamos a pensar en esto?-preguntó.
-No lo se –dije y me recosté en el sofá dejando mi cabeza en sus piernas.
-Juntos-dijo el entrelazando sus dedos con los míos.
-Por siempre-termine la oración.
-Siempre es un tiempo muy largo
-Que no tengo miedo de afrontar

-Voy a comprar algo al supermercado que esta cerca, si? Ahora vuelvo-dijo Luke mientras cogía las llaves del auto.
-No te demores si? No me gusta estar sola en casa-dije.
-No le abras a nadie, te amo-dijo dándome un beso en los labios.

Luke salió por la puerta principal, me deje caer en el sofá. Estaba agotada, pero no físicamente sino mentalmente. Mi mente no había dejado de pensar en las posibilidades que había de que ellos se hubieran dado cuenta que ya sabia todo.

-__________-dijo una voz detrás mío.

Me estremecí al reconocer su voz. Era el. Me voltee para verlo, él se acerco a mi,hasta llegar al sofá parándose enfrente mío.

-Que..Que haces aquí?-dije tratando de controlar mi voz.
-No contestas mis llamadas, pensé que te había pasado algo-dijo Harry mirándome a los ojos-Me preocupo por ti.

Tenia ganas de tirarle una cachetada como era capaz de mentirme mirándome a los ojos, cómo pudo engañarme dos veces?

-Como entraste?-pregunte calmando mis respiraciones.
-No es un edificio muy seguro-dijo con una sonrisa torcida-Nunca llegaste a la dirección que te envié.
-No pude-dije seriamente.
-Pasa algo?-preguntó mirándome fijamente.

Me daba asco tan solo sentir su mirada en mi, me daba repugnancia y miedo verlo a los ojos, encontrarme con esos ojos que antes hacían sentir de una y otra manera segura.

-Que quieres?-pregunte fríamente.
-Ya lo dije, segura que estas bien? Te noto rara
-Así soy yo es por lo del embarazo.
-Ah.-respondió secamente.
-Has pasado por la boutique? La de Alisson?
-No, ya no trabajo por ahí-dijo mirando a la nada.
-Alisson no me contesta mis llamadas, y no se que hacer.
-Llama a Scott-dijo.
-Como sabes de Scott?-pregunte haciéndolo caer en su misma trampa.
-Luke esta aquí?-pregunto ignorando mi pregunta anterior.
-Si-mentí-Esta arriba.
-Mientes, lo vi salir-dijo y se acerco a mí.

Tomo mi muñeca, tomándola fuertemente provocándome un dolor horrible en esta zona.

-Baja a Isabela ahora-dijo y me empujo.

Subí las escaleras como pude, si escapaba iba a terminar muerta. Era mejor seguir sus ordenes por lo menos por un tiempo.

-A donde vamos Mami?-pregunto Isa aun adormilada.
-A ningún lugar, solo duerme-le dije para que no pudiera recordar nada de esto.

Baje las escaleras con ella en brazos y apenas pise el suelo de la primera planta el me volvió a tomar bruscamente por la muñeca, volviendo a lastimarme.

-Dámela-ordenó.
-No-dije sosteniéndola con más fuerza.
-Esta bien llévala tú como quieras-dijo y me arrastro hasta la salida del departamento.

“Luke, dónde estas?”-pensé.

Continuara…