CAPITULO XVI

434 54 25
                                    

Estaba caminando junto a Momo ya que se ofreció a enseñarle el castillo, era todo hermoso mientras más veía el adorno más se enamoraba, habían plantas por doquier y se sentía tan ogareña, simplemente hermoso.

Pero su sonrisa se esfumó cuando vio a Bakugou a lado de la princesa Toga, tenía que admitir que se veía bella con ese vestido negro con café pero recordó el pequeño inconveniente que tuvieron el día de ayer y eso la hizo sentir más extraña, era incómodo verla agarrada del brazo de su prometido.

-Buenos días- saluda Himiko con una sonrisa hipócrita, mira a Ochaco y se acerca más al rubio cenizo.

-Buenos días querida- responde Momo.

Ochaco prefiere no hablar y desvía la mirada de los jóvenes enfrente de ella, es mejor hacerse la desentendida que analizar lo que está sintiendo en esos momentos ya que su corazón no para de latir y siente un nudo desagradable en el pecho, esa era la primera vez que veía a Katsuki en el día y ¿enserio estaba con ella?

-Mmm- entre cierra los ojos como si estuviera analizando algo- no creen que es raro que cada vez que los veo ustedes están juntos.

-¿A qué te refieres?- pregunta inocentemente Toga- ¡Ah ya!...verás lo que pasa es que Katsuki me enseñará a cabalgar- se aferra más al brazo ajeno- ¿No creen que es genial?

Cuándo la castaña escuchó eso fue como si...algo en ella se hubiera roto, Bakugou le había prometido enseñarle a ella y ahora...ahora él...

-No me digas- dice con tono fingido de asombro- oye Ochaco no me habías dicho que Bakugou también te iba a enseñar a ti.

-A-ah...

-Vamos sirve y nos enseñas a las tres- menciona Momo- o ¿Tienes algún inconveniente príncipe Bakugou?

Katsuki el cual no había dicho ni una sola palabra desde que se las encontró, la castaña era la última persona que quería ver en esos puntos momentos, todo iba de su puta madre, había cogido con Toga hasta saciarse, lo que menos quería era pensar en la castaña, es más no quería ni verla en pintura, pero los malditos chismes corren velozmente y lo que menos quería era estar en la boca de todos los jodidos extras por ignorar a su prometida y estar con otra mujer.

-En absoluto- su voz era brusca.

-¡Magnifico!- exclama Momo.

-De acuerdo- habla Toga- iremos a cambiarnos y nos vemos en las caballerizas.

Momo y Ochaco se van dejando a Toga aún con Bakugou, no quiere pero no puede evitar voltear a verlo, cruzan miradas por un par de segundos hasta que él decide irse de ahí. Todo era tan extraño su comportamiento, su relación, incluso ella misma se siente diferente y simplemente no lo entiende...

-Te prestaré uno de mis vestidos para montar, si- dice Momo esculcando su armario.

Ochaco solo la quedó viendo y se dispuso a despojarse de su ropa, pero algo estaba mal...

-¿No vas a cambiarte Momo?- pregunta Ochaco extrañada.

-A no, claro que no- le regala una sonrisa- es obvio que esa arpía quiere estar con tú prometido y no hay que permitir eso.

-Momo...- habla despacio- si tú no vas creo que yo no debería...

-Ni de chiste- la interrumpe- es tú prometido y tienes muchos más derechos de estar con él que ella.

Ochaco se dirigió a las caballerizas y dios que hermosos animales, son unas criaturas hermosas, se acerca a un caballo color negro, muy hermoso y comienza a acariciar su cabeza.

BUSCANDO EL AMOR ❤️Kacchako❤️ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora