Tres

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-Quiero ser detective

A muchos nos dejó sin palabras, pero esto no pareció sorprenderle a Clark, ¿será que lo habrán hablado antes? Lo pensé por un momento, ¿por qué querría ser detective?

-Susan.

Me giré y Ellie me hizo señas con la mirada

-Susan-reiteró Clark- ¿qué estudiarás?

-Trabajaré de lavaplatos

Alguien escupió, otros se rieron, pero por primera vez, Clark me miraba con desaprobación, no alejé la mirada, ¿era algo malo un empleo así? Si le preguntaran a Chris diría que fue una buena respuesta, incluso diría realista.

-Creo que desperdiciaría potencial ahí, Gutiérrez.

Entonces alejé la mirada y retomé la lectura infinita del mismo párrafo de mi libro. Por un momento fui Susan, en cuestión de nada volví a ser Gutiérrez. Todos con sueños y planes, y yo enfocada en cómo me llaman.

Chris pasó por mí al salón, lo cual agradecí, entre el bullicio me pareció ser llamada por Clark, pero me pareció, así que de una manera apresurada pero natural me fui con Chris.

-Hoy andas de muy mal humor.

-Pareciera que soy la única de la clase sin saber qué quiero estudiar.

-Bueno no es como que sea obligación, puedes tomarte un año en lo que piensas, mientras tienes algún empleo, ahorras...

-Sobre ahorros tengo suficiente, lo sabes.

-Hablo sobre tiempo, y un dinero extra no le cae mala a nadie.

Ahora extendí mi mal día a Chris, y no sería fácil ocultárselo a Melanie ni Lily.

-¡Susy!

-¡Lily!- intenté imitar su entusiasmo pero terminé por hacer una mueca.

-Lily déjala, tuvo un mal día, déjala que duerma.

Miré de reojo que Melanie no estaba en la sala así que aproveché la mentira de Chris y me encerré en el cuarto, después de todo no era una completa mentira, me recargué sobre la puerta y lentamente puse el cerrojo, no debería sentirme molesta por Clark y Ellie, no debería importarme siquiera, pero lo hacía, y eso me molestaba, no debería desquitarme con Chris, Lily... y lo hacía, era un a terrible persona, después de lo que han hecho por mi, los culpo por algo tan pequeño, como mis infantiles emociones, me limpié las lágrimas y tomé una libreta, tal como lo había hecho Chris días atrás, comencé a trazar mi futuro, le demostraría a todos y sobre todo a mi misma, que podría salir adelante, que estaba lista y preparada. Salir del cuarto y seguir con la idea de mi mal día y unos minutos de sueño no formaba parte de repentino cambio interno, Melanie me indicó que podía calentar la comida si tenía hambre, miré el reloj y lo que creí eran ¨minutos de sueño¨fueron horas, de planeación de mi futuro y presente, lo hice y mientras se calentaba me acerqué a Melanie quien miraba la televisión con Chris, viendo la televisión con el volumen casi inaudible.

-Lo siento.

-Está bien Susan.

Su respuesta fue como quien te sonríe pero no les alcanza los ojos, pero no supe que más agregar, no supe justificarme, así que volvía a la cocina, movía el guisado de un lado a otro, como si así ordenara mis pensamientos o razonamientos, como si pudiera encontrar algo decente que decir, pero seguía frío, no dejaba que se calentara por ningún lado, y lo comprendí, debía esperar.

Como en todas las familias, con el tiempo las aguas vuelven a su curso, la relación volvió a ser la de antes, con todos.

Era nuestro último día oficial de clase, nuestro próximo encuentro con mis compañeros sería en la ceremonia, eso me tenía algo triste, después de todo, pasé unos años inolvidables con ellos. Me propuse de manera madura, tratar de no ser una odiosa respecto a Ellie y Clark, este último día y cerra bien un ciclo, dejar todo esto en el pasado, al final de cuentas, no nos volveríamos a ver y esto quedaría en un ridículo enamoramiento a un maestro y un romance de fantasía entere un maestro y alumna.

Bajo Tu SombraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora