𝑻 𝒊 𝒆 𝒎 𝒑 𝒐

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Soobin regresa una noche de otoño a su habitación con las muñecas adoloridas, con el corazón herido. Rápido la cierra y contempla la sangre que lleva derramando, todo el dolor que este refleja. No sabía como había conseguido salir vivo.

Habían pasado exactamente un poco más de dos meses desde que había ingresado, desde entonces Soobin no quiso adaptarse a las reglas y las consecuencias las estaba pagando muy duramente. Esa vez lo habían castigado por llorar cuando un profesor le gritó por una razón cuestionable, clavándole un clavo en cada muñeca, para después sacárselo cruelmente. Después de eso le desinfectaron la herida, pero no la cubrieron, estaba sangrando a montones.

Con lo que no contaba el chico era que en ese momento Taehyun estaba en su habitación, para poder sorprenderlo cuando llegara, pero el sorprendido terminó siendo él. Soobin maldecía en bajo que lo estuviera viendo de esa manera.

- Soobin , ¿qué ocurrió? - pregunta, con el ceño fruncido, acercándose apresuradamente al azabache - Oh, demonios, ¿qué te hicieron esas asquerosas personas?

- Tae, no-

- Soobin, no intentes justificarlo, literalmente estas derramando litros de sangre - le dice, con la voz desesperada - ¿Sabes qué? Iré a buscar unas vendas, esto no esta bien, no puedes estar así - se acerca a la puerta, dispuesto a hacer lo que estaba planeando, pero Soobin lo detiene de inmediato.

- No, no... por favor, pueden descubrirte , por favor.. - le suplicó, llorando con mucho más desesperación y miedo, a Taehyun le dolió el pecho cuando lo vió de esa manera, tan vulnerable.

Pero no necesita dar explicaciones ni largas líneas, así que solo abre la puerta y se va a hacer su cometido, ignorando la mano lastimada de Soobin intentando detenerlo. Entonces el chico no sabe que hacer, el corazón le esta palpitando del terror.

Pasaron eternos minutos, minutos en donde Soobin temblaba del miedo y se retoricía del dolor por la herida que tenía , estaba demasiado ansioso.

Entonces Taehyun vuelve, entra y cierra la puerta en silencio.

- Nadie me ha visto, tranquilo. - le dijo, cuando notó su cara de espanto, acercándose un poco , diciendole con la mirada que le mostrará sus muñecas heridas. Soobin entonces quiso negar indeciso, pero la mirada del pelirrojo no se lo permitió, así que mostró sus terribles heridas, aquellas que se había esforzado por cubrir con las mangas para amortiguar el sangrado.

Por alguna razón Taehyun, tenía los ojos tristes, cambiantes, inseguros. Estaba débil, entonces lo supo ; supo que su debilidad le dolía mucho más que la propia.

Él no era así.

Estaba seguro, pero no quiso decírselo. Solo se dedicó a quejarse del dolor por sus recientes toques, disimulando sus preguntas. Aunque, sabiendo lo que pasaba cuando pensaba demasiado, sabía que Taehyun lo sabía, él tampoco quería decirlo.

Ya cuando tenía vendas en su muñeca, protegiendole las dolorosas heridas, se quedaron en un incomodo silencio, uno muy triste, sin saber que decirse los unos a los otros. Taehyun sabía lo que Soobin estaba pensando, como siempre. Soobin no tenía ni la mínima idea de lo que Taehyun estaba pensando.

¿Cuando se volvió en algo así?

Antes ansiaba por poder ver al pelirrojo de nuevo, ansiaba por poder ir a varios lugares con él, solo con el simple hecho de estar con él se emocionaba y se mantenía alegre, porque Taehyun tenía la magia de hacer eso, de hacer que se sintiera alegre.

Ahora, estaba nervioso y preocupado cada y que iba a verlo, cada y que veía su rostro ; sentía que algo había cambiado y que no volvería a ser igual. Soobin lo seguía queriendo, era un enorme hecho, lo iba a querer por mucho tiempo. Pero ya no sentía que fuera lo mismo, todo se quebró desde la noche en donde sus padres descubrieron lo suyo y le dijo eso, esa noche que pareció ser un punto decisivo acerca de lo que pasaría después, definitivamente lo creía. Definitivamente lo había sido.

𝐏 𝐇 𝐀 𝐒 𝐄 ; Taebin ▪︎ Soohyun ; ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora