Capítulo 12: Segundas Nupcias

917 75 10
                                    



Buenos días/tardes/noches. Ya sea en el horario que me estén leyendo, aquí estoy de nuevo de vuelta y con mucha vergüenza por la  enorme demora no pensé tardarme dos meses para poder traerles el final de esta historia, pero cosas de fuerza mayor como mi salud y problemas de internet me tuvieron bastante ocupada entre otras cosas... en fin de verdad mil perdones, espero que aun me lean y aquí les dejo leer finalmente la conclusión de "Esposo Infiel" muchas gracias por todo ^^

---------------------------------------------------

Era un día estupendo, Kagome se relajó feliz, en el Porsche de Sesshomaru. Iban por la autopista rumbo a la ciudad. ¡Habían pasado tantas cosas en tan poco tiempo! Sesshomaru estaba nuevamente en su vida, y era maravilloso. Al día siguiente sus padres volvían a Geelong, y en una semana, Sesshomaru y ella volarían a Nueva York. Había pedido un mes de vacaciones en su oficina. Y se lo habían dado sin ningún problema.

–Estás pensando en algo bueno, supongo, ¿no? –preguntó Sesshomaru.

No podía ser de otro modo. La noche anterior había sido maravillosa, y su recuerdo los llenaba de emoción.

–Tienes que doblar a la derecha –le advirtió Kagome.

–Ha habido un pequeño cambio de planes.

–¿No vamos a la casa de Sota y Hitomi?

–Hoy, no.

–Pero vamos a reunimos con ellos, ¿no?

–Sí, por supuesto.

Ella lo miró con curiosidad.

–Si te lo pregunto, ¿vas a decírmelo?

–¿Decirte

–Me rindo, me rindo... ¿Cuál sería la sorpresa? ¿Un picnic en el parque? ¿Un restaurante?

« ¿Toorak?», pensó cuando lo vio entrar en High Street. Hasta que no llegó a una calle que le resultó conocida no se dio cuenta de lo que sucedía. Entonces empezó a sospechar. Si doblaba a la izquierda, sus sospechas se confirmarían... Y lo hizo.

Se trataba de la casa que habían visto en Toorak. Aquélla de la cual ella se había enamorado cuando la habían visto juntos. Sesshomaru abrió el portón de hierro y condujo hasta la casa.

–Bienvenida a casa.

–¿Has comprado la casa? –ella no podía creerlo. Se quedó sin habla. –¡Es hermosa! –exclamó cuando se recuperó. Le agarró la cara y lo besó– Te amo –le dijo.

Sesshomaru se desabrochó el cinturón de seguridad.

–Vamos dentro –le dijo.

La puerta de entrada se abrió cuando salieron del coche. Naomi bajó la escalinata para saludarlos. Kagome abrazó a su madre.

–¿Tú estabas... aquí?

–¿No te parece una sorpresa maravillosa? –dijo Naomi.

Entraron en la casa, y ella se quedó sorprendida.

–Los muebles... Sesshomaru, son los mismos –sintió un nudo en la garganta.

–Lo compré todo.

–¿Todo?

–Todo –Sesshomaru se rió sensualmente. Y ella corrió a abrazarlo. –Me parece que estamos incomodando a tu madre...

–Más tarde seguimos... –respondió ella.

–Sólo una cosa más –dijo Sesshomaru.

–¿Hay más? –preguntó Kagome.

Esposo InfielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora