No recuerdo desde cuando quise ser psiquiatra. Han pasado tantos años desde que trabajó en lo mismo que a veces pienso que siempre fue algo que deseé. Quizás nací para esto, hay personas que creen que nacen con un destino fijo, quizás ese fue mi caso.
Estoy solo a unos años de jubilarme, estoy preparado para darle nuevas oportunidades a personas más jóvenes para que ocupen mi lugar. No es algo que me molesta, de hecho me alivia saber que vienen nuevas generaciones con más fuerza a reemplazarme.
Quiero disfrutar de mi esposa y mis hijos. Quizás irnos de vacaciones, comprarnos una casa en la playa y comenzar una nueva vida en un pueblo costero que sea tranquilo y no tan ruidoso.
Después de todo nuestra vida viviendo en Seúl, quizás es momento de dejar el caos atrás y comenzar a vivir una vida más tranquila.Pero para eso aún faltan unos años, debo dejar de divagar y poner antecion en mi próxima cita.
Es un chico de 22 años, vino a mi hace unos 8 meses, siendo un desastre andante, dañaba emocionalmente todos a su alrededor y al darse cuenta del daño que hacía a los demás se hacía daño a él mismo.
Es un caso de esos que cuando lo vi entrar por la puerta supe que sería complicado, pero no imposible.
Supe que aún es joven y que con mi ayuda, pero más importante con su propias ayuda este chico puede salir de ese bucle infinito de daño hacia los demás y hacia sí mismo.Estos meses hemos hablado mucho, lo he conocido a fondo, sus temores, su niñez, su familia y las razones para dañarse a sí mismo.
Pero mi intuición me decía que seguía faltando me algo, seguía sin ver las cosas con claridad, algo me molestaba, por lo que hace casi un mes decidí ser sincero con él.
Se lo dije le explique mis pensamientos y le propuse algo que con él no lo tenía contemplado.Le hable de la hipnosis, le conté como puede ayudar a saber cosas que tal vez están ocultas y suprimidas en su mente, ahí muy en el fondo navegando en la oscuridad de su mente, pero también le conté lo vulnerable que queda a mi voluntad, que si hago mal mi trabajo puedo incidir negativamente en sus recuerdo, los puedo manipular sin darme cuenta y quizás cagarla como nunca lo he hecho.
Esto se lo explico a todos mis pacientes. Algunos les da miedo - fundamentado - y lo rechazan. Este chico lo pensó, indagó el mismo en Internet, con sus grandes ojos curiosos me pregunto y preguntó cosas y finalmente se decidió y acepto.
Hoy sería la primera sección.
No tengo temor, confío en mi capacidad que se ha ido formando a los largo de las años.Actualmente tengo a 5 pacientes más con hipnosis todos ya llevan años aquí conmigo, algunas regresiones son más interesantes que otras, algunas son más enigmáticas que otras, algunas me dejan pensado por días y otras las anotó en mi cuaderno y la luego las olvido.
Jungkook esta nervioso, esta sentado en el diván moviendo las piernas frenéticamente, esta aguantando las ganas de morderse las uñas, por lo mismo se muerde el labio, sus ojos son grandes y brillantes y tienen sus manos apretadas a su costado.
- Podemos dejarlo para la próxima sesión, no pasa nada Jungkook - le tiendo un pequeño vaso de agua y el chico con sus manos temblorosas los recibe - respira chico - vuelvo a intentar calmarlo y darle confianza.
- Lo siento señor Kim - susurra luego de beber varios sorbito de agua.
Comienzo a distraerlo y contarle sobre mis hijos y sus travesuras, tienen efecto y 20 minutos después el chico se encuentra totalmente calmado, estirado en el diván y yo comienzo con la sección de hipnosis.Es abrumadoramente fácil y receptivo. Hablamos de temas seguros, temas que ya conozco y que hemos hablado por meses.
Pero hay un momento en que lo pierdo, él se pierde y ya no responde a mis preguntas - ¿Jungkook? - le pregunto varias veces hasta que me responde.
ESTÁS LEYENDO
L A Z O S (Jinkook) (twoshot)
Fiksi PenggemarUn psiquiatra del que poco sabemos nos cuenta una corta historia. (Historia original)