Volver a casa (STW 3º)

Capítulo 40

- Ya volví - dijo mi amado esposo entrando al loft.

- Tardaste mucho.

- ¿Qué te digo? El tránsito está muy pesado últimamente - se acercó y antes de que me besara me aparté - ¿Qué ocurre?

- Hice algo terrible - dije apenada - te mentí.

- ¿Sobre qué?

- Hace tres meses, cuando bajamos la electricidad en la casa Eichen... pasó algo muy grave... Peter escapó.

- ¿Qué?

- Sé que debí contarles esto antes, pero no quería preocuparte... a ninguno de ustedes, pero debes entender que lo hice pensando...

- Espera Em - me interrumpió - es que no sé de quien me estás hablando.

¡¿Disculpa?!

- Am... de Peter Hale, el hermano de tu madre - dije obvia.

- Emily no sé lo que te pasa, mi mamá nunca tuvo un hermano - ante eso lo vi más confundida que antes - y nadie en mi familia se llama Peter.

- A mí no me pasa nada - dije aún más confundida y caí en la cuenta de algo - Derek muéstrame tus ojos.

- ¿Qué? - preguntó mientras yo me quitaba mis lentes de contacto.

- Por favor - suspiró antes de mostrármelos y me enfoqué con mis ojos notando un brillo verde a penas visible - oh no, oh no.

- ¿Qué? ¿Qué ocurre? - preguntó mientras yo tomaba mi bolso.

- Están aquí, no sé porque pero están aquí y tienen a Peter... por eso no lo encontramos.

Vacíe todo su contenido en el escritorio y tomé mi bestiario para buscar la página correcta, pero antes de encontrar el capítulo vi como la hoja de la beca de Stiles estaba en blanco. Dejé mi bestiario para tomarla con manos temblorosas, los datos que había llenado esta mañana habían desaparecido.

- ¿Emily? - me llamó Derek.

- Derek - dije asustada - ¿Conoces a alguien llamado Stiles?

- ¿Stiles? ¿Ese es un nombre? - ante eso dejé todo para salir corriendo del loft mientras sacaba mi teléfono para llamarlo.

- Por favor Stiles, por lo que más quieras contesta.

- El número que ha marcado no existe.

- ¡Maldición! - con eso bufé antes de convertirme en loba para llegar a la escuela.

A penas llegué volví a mi forma humana para empezar a buscarlo por todas partes, cuando pensé que era demasiado tarde me llegó su aroma a lo que volví a correr en esa dirección.

- ¡Stiles! - grité saliendo del edificio comenzando a desesperarme - ¡STILES!

- ¡Emily! - corrí en esa dirección y suspiré aliviada al encontrarlo, no lo pensé mucho y lo abracé.

- Gracias a Dios que aún no te llevan - dije mientras me separaba de él.

- ¿Sabes de la cacería? - preguntó Lydia.

- Alguien a quien buscábamos desde hace meses desapareció y nadie, ni siquiera sus familiares lo recuerdan... y cuando buscaba información de ellos, vi la solicitud de beca de Stiles y me aterré al verla en blanco.

- ¿Una solicitud de beca? - preguntó incrédulo.

- Perdón, creo que arruiné la sorpresa... pero eso no es lo importante, debo llevarte al río de la memoria ahora.