Harry Potter Y La Venganza Del Mago

capitulo 8

Quedaban solo 2 días para volver a Hogwarts, pero eso no cruzaba por la mente de Harry en este momento.
Lo único que Harry tenía en su mente era lo delicioso que cocinaba su padrino.

Luego de una noche alborotada como la anterior, Harry había quedado dormido tan pronto como Sirius lo dejó descansar.
Al día siguiente fue despertado por Sirius y un par de deliciosos panqueques con miel, al probarlos fue como si hiciesen una deliciosa exploción dentro de su boca.
-Esto es demasiado delicioso para ser real-.Elogió Harry

Sirius se encontraba a su lado alimentandolo en la boca como si fuese un bebe.
-Me alegra que te agrade mi comida.

Luego del desayuno, Harry decidió que era momento de retirarse, aunque sentía que a nadie le importaba que estuviese un poco más fuera de la Mansión Malfoy, pero debía prepararse para Hogwarts.
-Pasado mañana volveré a Hogwarts como Nicolás Brickman, seré maestro y empezaré a acercarme mucho más a Dumbledore, espero contar con tu apoyo.

Sirius se acercó y entendiendo que el momento de pasión había terminado, volvió a tomar el papel de padrino y tomó a su ahijado por los hombros para mirarlo fijamente.
-Puedes contar conmigo cuando sea, ten mucha suerte.

Harry Sonrió y le dio un beso en la mejilla para luego atravesar la red flú ahcía la mansión Malfoy.

Cuando cruzó, se encontró a Draco algo alterado que al verlo lo tomó de la muñeca y empezó a arrastrarlo.
-¡¿Dónde demonios te encontrabas?!, el Lord te citó anoche para una reunión privada, pero cuando le dijeron que no estabas en la Mansión se puso algo molesto y nos ordenó a todos que te avisaramos en cuanto aparecieras que debías ir a su despacho, bueno, es el mismo que el de mi padre-.

Harry apenas tuvo tiempo de procesar todo que cuando se dio cuenta ya estaba en frente de la oficina de Malfoy, sin responder a Draco, entró.

Dentro se encontraba Lord Voldemort detrás de gran escritorio revisando un archivo que guardó en cuanto se dio cuenta de la presencia de Harry.
-¿Puedo saber dónde estabas anoche cuando mandé a llamarte? -.Las palabras habían sido pronunciadas con suavidad, como una bomba a punto de estallar.

Pero Harry no dejaría que la molestia de esa bomba le salpicara.
-Me encontraba en la residencia Black, mi padrino está allí y quise pasar un rato con él...-.

Antes de poder termianar, Harry sintió una punzada en su cabeza, supo que Voldemort estaba revisando su mente para corroborar si su historia era cierta.

Al ser una intromisión muy repentina, no tuvo tiempo de ocultar los recuerdos de su noche íntima con Sirius.
Para cuando volvió a ser consiente de la realidad, estaba siendo maldecido con un cruciatus de mucho poder que lo hizo retorcerse en el suelo.

-¡Dejaste la Mansión Malfoy solo para acostarte con tu padrino!, que sorpresa Potter, pensé que eras de esos que querían llegar vírgenes al matrimonio, eres todo un engaño-.mencionó con tono burlesco, luego de un rato siendo torturado, su versugo lo dejó en paz .- dejando eso de lado, ya todo está listo, tus aposentos en Hogwarts tienen una red flu que se conecta con esta Mansión directamente, pero debes decir una contraseña antes de cruzar, la contraseña es "Venganza", solo puedes usar la conexión en casos de emergencia -.

Harry al recuperarse, se levantó del suelo, aunque aún se encontraba temblando por la maldición Cruciatus.

En cuanto el Lord le dio permiso de retirarse, lo hizo, estaba demasiado dolorido, y cuando estaba  a punto de caer al suelo del dolor, un brazo lo rodeó para estabilizarlo.

Al mirar arriba se dio cuenta de que se trataba de Draco.
-Mira como estás, vamos, te llevaré con Severus, él tiene pociones para el dolor de la maldición-.