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Una noche fría, el aire estaba cargado de tensión mientras Mahiru y Katsuki se encontraban en medio de una discusión que amenazaba con arruinar una relación que parecía ir de lo más bien. El ambiente estaba tenso, como si el frío de la noche hubiera invadido sus corazones.

Mahiru se sentó a un lado de Katsuki, mostrando una sonrisa que intentaba ocultar el conflicto interno que lo invadía. El rubio, por su parte, parecía inquieto y nervioso, como si llevara un peso en el pecho que no podía sacudirse.

Katsuki intentó hablar, pero las palabras se quedaron atoradas en su garganta. En su lugar, decidió tomar al chico de las mejillas y lo besó lentamente. Fueron solo unos segundos, pero bastaron para expresar todo lo que sentía. Sin embargo, la reacción de Mahiru fue inesperada.

El chico de cabello negro empujó a Katsuki bruscamente y lo apartó con enojo. Sus palabras, cargadas de dolor y confusión, resonaron en el aire.

Mahiru: ¡LÁRGATE! ¡NO QUIERO VERTE NUNCA MÁS!

El grito alertó a muchas personas cercanas, quienes se acercaron para presenciar la escena, entre ellas Shoto. Miradas de rabia y confusión se posaron en Katsuki, quien intentó acercarse nuevamente a Mahiru, buscando respuestas.

Con lágrimas en los ojos, intentó explicar lo sucedido, pero sus palabras parecían insuficientes. La situación era complicada y no encontraba las palabras adecuadas para dar una explicación.

Shoto, por su parte, se mostró herido y enojado por la escena que había presenciado. A partir de ese momento, se alejó de Mahiru y Katsuki, evitando cualquier encuentro con ellos. La tristeza y el dolor se reflejaban en sus ojos bicolor mientras intentaba comprender lo que había ocurrido.

Con el paso de los días, Mahiru y Katsuki se vieron más cercanos, pero no por deseo romántico, sino como amigos. A pesar de la situación, trataron de mantener una relación amistosa, aunque sabían que las cosas ya no serían como antes.

Shoto, por su parte, se mostraba distante y retraído. Evitaba cualquier confrontación con ellos y prefería pasar su tiempo a solas. La ruptura había dejado una marca profunda en su corazón, y se negaba a enfrentar la realidad de lo sucedido.

Los días transcurrían, y la relación entre Mahiru y Katsuki se fortalecía, cada vez más cercana y cómplice. A pesar de todo, Mahiru no quería quedarse atrás solo por Shoto, y estaba decidido a seguir adelante con su vida.

En medio de la confusión y el dolor, Shoto se encontraba en un estado de confusión emocional. En un intento por encontrar apoyo y consejo, se acercó a Izuku y Nejire, quienes lo escucharon atentamente.

Izuku y Nejire intentaron hacerle entender que Mahiru no amaba a Katsuki, sino que él era el objeto de su amor. Le aseguraron que él y Mahiru merecían estar juntos y que era cuestión de tiempo para que ambos se dieran cuenta de sus verdaderos sentimientos.

Aunque Shoto tenía sus dudas, sus amigos estaban decididos a ayudarlos a encontrar la felicidad que tanto merecían. Sin embargo, el camino hacia la reconciliación sería difícil y lleno de desafíos.

Con el apoyo de Izuku y Nejire, Shoto decidió enfrentar sus propios sentimientos y resolver la situación con Mahiru. Aunque el camino sería complicado, estaba dispuesto a luchar por el amor que compartían y encontrar la verdad detrás de lo sucedido.

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Mahiru intentó explicarse, tratando de expresar sus sentimientos y emociones, pero las palabras parecían no ser suficientes. La frustración se apoderó de él, sintiendo que no podía encontrar las palabras adecuadas para hacerle entender a Shoto cuánto significaba para él.

En ese momento, la distancia emocional entre ambos parecía aumentar aún más. La conexión que habían construido con tanto esfuerzo se encontraba en peligro, como un delicado hilo que amenazaba con romperse con cada palabra pronunciada.

Después de la discusión, ambos se quedaron en silencio, sumidos en sus propios pensamientos. Había una sensación de incomodidad en el aire, como si estuvieran al borde de un precipicio, sin saber qué pasos dar a continuación.

Esa discusión había dejado una marca en ambos, una cicatriz emocional que tardaría tiempo en sanar. A pesar de todo, la chispa de lo que una vez fue una hermosa conexión seguía presente en sus corazones, luchando por sobrevivir a pesar de las dificultades.

En los días que siguieron, Mahiru y Shoto se dieron cuenta de que necesitaban tiempo para reflexionar y comprender sus sentimientos. Sabían que para que su relación pudiera prosperar.

"Amor" no define lo que siento por ti / Todoroki Shoto X Male¡Reader (Rescripto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora